El asalto lo habría realizado presuntamente en colaboración de otros miembros de su familia.
La victimaria declaró haber intentado matar anteriormente a otras dos personas.
El juez ordenó la realización de la reconstrucción del homicidio.
Una adolescente de 14 años confesó haber asesinado a un taxista con un arma de fuego en Montevideo, cuyo cadáver introdujo en el maletero del coche que después quemó, presuntamente, en colaboración de otros miembros de su familia, dijeron fuentes de la jefatura de Policía en Montevideo.
La joven, que declaró haber intentado matar anteriormente a otras dos personas, también con un revólver, se encuentra a disposición del juzgado de menores, que determinará su traslado a uno de los hogares del Instituto del Niño y el Adolescente del Uruguay (INAU).
La jueza de menores le atribuye un homicidio muy especialmente agravado, un homicidio muy especialmente agravado en grado de tentativa, y un homicidio simple en grado de tentativa. Todos en reiteración real.
La policía encontró en la madrugada del domingo pasado un cuerpo calcinado dentro del maletero de un vehículo incendiado en las inmediaciones del hipódromo de Maroñas de Montevideo, y posteriormente se confirmó que pertenecía al trabajador del vehículo.
La madre de la asesina confesa y un joven mayor de edad se encuentran procesados, mientras que otra persona está prófuga, presumiblemente la pareja de la madre.
Además, otros dos menores se encuentran emplazados.
Detenidos robaban taxis
Según publicó este sábado el diario El País, todos los detenidos se dedicaban a robar taxis y la joven, que confesó el crimen "como si no le importara lo que hizo" se encontraba embarazada de tres meses.
La divulgación de las fotos de los sospechosos por parte de la policía fue fundamental para la detención de todos los involucrados.
Los taxistas de Uruguay, además de buena parte de las empresas de transporte público en autobús del país, realizaron entre el 8 y el 9 de diciembre varias horas de huelga para exigir medidas contra la inseguridad laboral en el sector.
"Otro trabajador, otro compañero, que sale de su hogar a ganarse el pan de cada día, y no vuelve más al cobijo de su familia. En este caso, un trabajador de 59 años, a punto de jubilarse, con toda una vida de labor por detrás", señaló la Unión Nacional de Trabajadores y Obreros del Transporte de Uruguay (UNOTT) en un comunicado.
