La decisión fue adoptada este jueves por la Corte Suprema.
Va en la línea de "hacer carne" su mea culpa por las omisiones del Poder Judicial durante la dictadura.
El acuerdo se oficializará alrededor del viernes, indicó el vocero del máximo tribunal, Hugo Dolmetsch.
El pleno de la Corte Suprema resolvió entregarle dedicación exclusiva a los jueces que investigan causas vinculadas a las violaciones a los derechos humanos durante la dictadura.
La decisión se conoce a un día de la conmemoración de los 40 años de golpe de Estado y a menos de una semana que, en el contexto de lo anterior, el pleno de la Suprema reconociera que el Poder Judicial incurrió en "graves acciones y omisiones" que, "en parte", permitieron la ocurrencia los referidos crímenes de lesa humanidad.
La instancia se reunió de manera extraordinaria para dar una respuesta "concreta e inequívoca", en línea con su declaración del viernes, indicaron los magistrados.
"Nosotros tenemos que ver esto y hacernos carne de lo que hemos pregonado en nuestra declaración", señaló el vocero de la Corte, Hugo Dolmestch, que anunció que el acuerdo verá la luz de manera oficial el día viernes "o cercano" a ese día.
La idea del máximo tribunal es también que ministros de la Corte de San Miguel integren una nueva sala en Santiago, la 12ª, para así descomprimir el trabajo en torno a las miles de causas de derechos humanos que se tramitan actualmente, y que tienen a alrededor de 600 procesados civiles y militares, incluyendo casos emblemáticos como "Caravana de la muerte", "Operación Colombo", "Plan Cóndor" y "Calle Conferencia".
"La Corte Suprema ha comprometido sus mejores esfuerzos en el esclarecimiento de esta clase de delitos, e insta a todos los ju eces de la Republica y funcionarios del Poder Judicial a persistir en tal tarea, como también al reconocimiento y promoción de los Derechos Humanos, tal cual lo prescribe la Constitución Política de la República", señalaba la declaración de la semana pasada.
Carga de trabajo "imposible"
La labor investigativa de los jueces de la Corte de Apelaciones de Santiago se ve también complejizada por otros factores, como los recursos contra las isapres y las causas civiles.
En tal sentido, la medida fue valorada por el ex ministro Alejandro Solís, que en el pasado condenó al ex director de la DINA, Manuel Contreras.
"La única forma de solucionar el volumen de trabajo que tienen los ministros de fuero en causas de derechos humanos es que tengan dedicación preferente. Si les damos dos días de descanso (respecto al trabajo en sala) tienen apenas dos días para derechos humanos, y con este cúmulo de causas es imposible (avanzar)", consideró Solís.
