Además, un 31,6 por ciento no tiene ningún tipo de previsión de salud.
Así lo mostró el estudio "Exclusión Social en Personas Privadas de Libertad".
Estudio fue realizado en base a la necesidad de implementar una política integral de reinserción social.
La Fundación San Carlos de Maipo entregó las conclusiones preliminares del estudio "Exclusión Social en Personas Privadas de Libertad", el cual verificó la falta de acceso a derechos sociales tales como educación y salud de la población penal en la época anterior a su encarcelamiento.
Un 87 por ciento de la población penal no posee educación escolar completa y un 31,6 por ciento no tiene ningún tipo de previsión de salud, reveló la publicación.
Además, presentan numerosas necesidades sociales y sanitarias no cubiertas tales como falta de vivienda, desempleo, marginación social, enfermedades físicas y mentales, y dependencia de sustancias como alcohol y otras drogas.
El estudio que muestra los niveles de exclusión social de la población privada de libertad en nuestro país, fue realizado en base a la necesidad de implementar una política integral de reinserción social que contribuya a fomentar la reinserción social y disminuir la reincidencia.
Se obtuvieron datos y percepciones de 2.000 personas privadas de libertad que contestaron una encuesta en la que se recogieron antecedentes de su situación de exclusión en los ámbitos laboral, económico, formativo, vivienda, personal y social.
Además, apuntaron que la población penal ha aumentado sostenidamente en las últimas décadas, creciendo más de 50 por ciento entre 2000 y 2010 en Chile.
Los resultados fueron dados a conocer en el Seminario Internacional sobre programas de reinserción sociolaboral para personas en conflicto con la ley penal organizado por Fundación San Carlos de Maipo, Paz Ciudadana, Telefónica además de la corporación Mañana.
