A la espera de que la Corte Suprema vea su caso, el ex subsecretario de Transportes afirmó que el magistrado que lo condenó en primera instancia sólo trabajó para lograr culparlo de delitos que no cometió.
Patricio Tombolini, ex subsecretario de Transportes inculpado en el caso coimas, afirmó que el juez del caso, Carlos Aránguiz, quien lo condenó en primera instancia a tres años y un día de prisión, sabe en su "fuero íntimo" que no tuvo pruebas para acusarlo.
En entrevista con Entre Nueve y Una, Tombolini afirmó que el ministro sabe que "nunca logró tener pruebas en contra mía. Los jueces que votaron en contra mía en Rancagua saben que no hay pruebas en contra mía y que tenían que tomar una decisión por otras consideraciones".
"Yo creo en la justicia. Siempre dije que no tenía ninguna confianza en la investigación, sigo señalando lo mismo, la investigación no fue orientada a buscar la verdad, sino a fabricar mi culpabilidad y eso no fue posible demostrarlo", acusó el ex funcionario público.
Según afirmó, "de cuatro ministros distintos al juez Aránguiz que han visto al proceso, dos ministros, entre ellos el fiscal de la Corte de Rancagua, han señalado que no hay antecedentes que me involucren. En el voto de minoría de la Corte de Apelación han señalado que no existen antecedentes en mi contra y que debo ser absuelto".
"A todos los profesores de derecho penal, a todos, les envié los antecedentes del proceso", añadió, explicando que de los que le han contestado, todos afirman "que no hay pruebas" en su contra.
Para Tombolini, de 51 años, lo más sospechoso es lo que llama la desproporción entre su condena en primera instancia, luego rebajada a 1.080 días de firma ante Gendarmería más el pago de la multa de 36 millones de pesos, y otras penas emitidas por tribunales.
"El otro día un señor que en la Cuarta Región mató a un tipo con una escopeta con mira telescópica lo condenaron a ocho meses. A un tipo que en Rancagua, en el mismo juzgado en que estaba yo, masturbaba niñitos le dieron 300 días. Entonces entiendes que estas cosas tan desproporcionadas son raras", indicó.
A pesar de esto, se mostró confiado en que la Corte Suprema, que verá su caso en 2006, actúe "en derecho".
La figura de su acusador
A tres años de la condena en su contra en primera instancia, una de las cosas que más le molesta es la credibilidad que se le dio a Carlos Filippi.
El empresario que destapó el caso, condenado por tres delitos de soborno a dos años de reclusión nocturna, inhabilitación perpetua de derechos políticos y tres multas que suman 56 millones de pesos, acusó a Tombolini de recibirle dos pagos de coimas por un total de 18 millones, a cambio de beneficios en su negocio de plantas de revisión técnica.
"Estuve 43 días detenido sin que hubiera ninguna cosa en contra mía, sólo los dichos de Filippi. Y Filippi qué dice, señala que a él le dijeron que yo pedía dinero, pero que no le constaba. Y todo el mundo le creyó, sin preguntarse nada".
A "un señor que vendió el año 2001, por lo cual yo lo denuncié a los tribunales de justicia, de manera ilegal alrededor de 90.000 certificados de revisión técnica. Que tiene en su cuenta corriente de ese año depósitos por casi 1.800 millones de pesos, esa es la persona a que todo el mundo le creyó".
"Filippi es un señor que los tribunales lo metieron preso por una denuncia del Ministerio de Trasporte porque era un vendedor de certificados de revisión técnica. Filippi es un tipo que lo detuvieron llegando de Argentina con certificados de revisión técnica falsos. Filippi es un tipo que en sus moteles en Rancagua se practicaban abortos. Todas estas cosas que estoy diciendo están acreditadas en tribunales de justicia. Filippi es un señor que en uno de sus autos le cambia el convertidor a gas y termina muriendo su yerno y un bombero en una bomba (de bencina) de Santiago. Ese es el señor que hace esta denuncia", enfatizó.
Tombolini asegura que la credibilidad que se le dio a las palabra de Filippi y la condena pública que tuvo por el caso le destruyeron la vida y que, ahora, sin trabajo, su único apoyo es su familia y "la gente de los radicales, que me apoyan".
El ex subsecretario tiene proyectado publicar un libro con antecedentes que ha ido juntando y con su visión del caso. "Creo que este otro año va a estar listo", concluyó. (Cooperativa.cl)
