María Teresa Johns lamentó que el ministro Jaime Solís se haya inhabilitado: "tenía todas mis esperanzas puestas en él".
"Quiero ahora un ministro imparcial, un ministro que se la juegue", dijo Teresa Johns.
El representante de la familia Matute Johns, abogado Fernando Saenger, calificó como una situación "inesperada" el vuelco que tuvo el caso en las últimas horas, debido a que el ministro Jaime Solís, quien reabrió la causa y que la llevaba hasta este momento, decidió inhabilitarse.
La decisión la tomó Solís por ser el suegro de Farid Harun, quien declaró en varias ocasiones como testigo en esta causa por la desaparición y muerte de Jorge Matute Johns.
Harun se casó el 19 de octubre del 2013 con la hija del magistrado y en la resolución firmada por el ministro dice que "carezco de la imparcialidad necesaria, requisito esencial del debido proceso en el conocimiento de esta causa tendiente a asegurar un resultado justo y equitativo dentro del proceso".
La familia Matute Johns, en voz de la madre María Teresa Johns, declaró que desde que el ministro Solís había reabierto esta causa había manifestado sus esperanzas en que finalmente fuera el actual presidente de la Corte de Apelaciones de Concepción quien llegase a la verdad.
Con tristeza, expresó que "yo puse toda mi confianza, tenía todas mis esperanzas puestas en él y ahora salen con estas cosas, no lo entiendo. El Poder Judicial tiene una deuda conmigo, hace 15 años que toco puertas y todo lo tapan, tapan el caso de mi hijo, hasta cuándo".
"Por eso quiero ahora un ministro imparcial, un ministro que se la juegue", agregó.
Dificultades
Saenger indicó que ahora se abren dos flancos: una posibilidad es que ellos recurran a esta decisión del ministro en visita y la otra es que se nombre a otro ministro para que conozca de esta causa. En este último caso, el abogado dijo que se genera un problema grave por la cantidad de fojas que tiene la causa y de antecedentes que debería tomar conocimiento el nuevo ministro.
"El problema está en que absorber para un nuevo ministro esta fantástica cantidad de fojas que son como 20 mil, más de 40 tomos, es un trabajo gigantesco, enorme y, entonces, nos dificulta el proceso de continuar con la investigación en las aristas que estaban realizándose", expresó.
El abogado agregó que "un ministro necesita muchos meses para poder estudiar todo esto".
