Tres ex carabineros y un agente civil recluidos en Punta Peuco por el degollamiento de tres comunistas y el asesinato del carpintero Juan Alegría exigen beneficios similares a los de algunos reos subversivos.
Una huelga de hambre de carácter indefinido iniciaron tres ex carabineros y agente civil de la dictadura que permanecen recluidos en el penal Punta Peuco, por violaciones de derechos humanos.
Los huelguistas pretenden obtener beneficios similares a los recibidos por algunos reos subversivos amnistiados por el Presidente Lagos.
Los huelguistas son los ex miembros de la Dirección de Comunicaciones de Carabineros (Dicomcar) Guillemo González Betancourt y Alejandro Sáez Mardones y el agente civil %b%Miguel Estay Reino. Todos ellos están condenados por el degollamiento de tres profesionales comunistas en 1985.
A ellos se suma Armando Cabrera Aguilar, condenado a cadena perpetua por el asesinato, en 1983, del carpintero Juan Alegría, crimen con el que se pretendía ocultar la verdadera autoría del homicidio del dirigente sindical Tucapel Jiménez.
La esposa de Cabrera Aguilar, Iris González, señaló que los huelguistas exigen que, tal como a algunos reos subversivos, se les otorgue el indulto presidencial.
"Quieren que les hagan el mismo derechos que tienen las mismas personas, de dejarlos en libertad. Están pidiendo beneficios porque ellos ya llevan más de 13 años y no pasa nada con ellos. Nadie los ayuda, nunca les han dado beneficios", dijo.
Añadió que la movilización asimismo tiene por finalidad hacer valer los beneficios penitenciarios que le corresponden y que no han recibido en sus 13 años de presidio.
Iris González señaló que los huelguistas decidirán durante el fin de semana si dejan de ingerir agua.
