Arturo Herrera respalda la tesis elaborada en 1979 y que sindicó a Patricio Pincheira Villalobos como el asesino del menor en la comuna de Providencia.
Al igual que en junio de 1979, la Policía de Investigaciones dio por aclarada la muerte del menor Rodrigo Anfruns Papi, caso que fue reabierto por la Justicia por los nuevos antecedentes que vinculan a funcionarios de la institución con el crimen.
El director de la policía civil, Arturo Herrera, afirmó que todas las pericias comprueban que Patricio Pincheira Villalobos es el asesino.
"La avalo, porque he tenido la suerte de leer la copia de un parte que tenemos de esa época y es muy concluyente con los peritajes y todo lo que se hizo en esa oportunidad", comentó el detective, quien agregó que el acusado, de 16 años en la época, es el responsable pues "eso es lo que se dice en ese parte".
Consultado por el testimonio del teniente en retiro de Carabineros Jorge Rodríguez, quien aseguró que dos detectives llevaron el cuerpo del niño, de seis años, hasta el sitio eriazo donde fue hallado, tras 11 días de secuestro, el máximo jefe policial dijo que es sólo una invención.
"Eso lo descarto plenamente, he conversado con algunos de los ex funcionarios que trabajaron el caso y eso no tiene nada que ver. Es una elucubración que se hizo y espero que quede descartada definitivamente en la investigación que están haciendo los tribunales", sentenció.
El caso por la muerte de Anfruns fue investigado en su momento por el juez Ricardo Gálvez, quien actualmente es ministro de la Corte Suprema, y de acuerdo a la versión oficial entregada en la época el crimen fue cometido Pincheira Villalobos, quien el 14 de junio de 1979 llevó a la policía a un sitio eriazo situado tras el hogar de los abuelos del niño, donde se halló el cuerpo.
Sin embargo, durante los 11 días que duró el plagio, personal de la policia uniformada rastreó en numerosas ocasiones el mismo lugar, sin encontrar el cadáver.
La versión sobre la culpabilidad del menor fue respaldada por la dictadura militar, cuyos ministros de Interior y Justicia, Sergio Fernández y Mónica Madariaga, respectivamente, públicamente apoyaron la tesis de Investigaciones.
Según Roberto Celedón, jurista que representa a Paola Papi, madre el infante, el juez Gálvez se condicionó a las tesis del Gobierno y no quiso aceptar el testimonio de quienes rebatían la postura oficial, desarrollada por Investigaciones, entre ellos, el del mismo teniente Rodríguez.
De acuerdo a algunas versiones desarrolladas en indagaciones periodísticas posteriores, indican que Rodrigo Anfruns Papi fue secuestrado por error, en el marco de una operación ilegal de los servicios de seguridad, por una rencilla personal entre oficiales castrenses. Por ello -de acuerdo a estos datos- el homicidio pudo ser encubierto y se culpó, con el respaldo gubernamental, al adolescente Patricio Pincheira Villalobos.
