Miguel Bau explicó que no tienen los recursos para reponer los vidrios del cuartel apedreado, por lo que debieron dejar en otras compañías sus carros, y llamó a la municipalidad de La Pintana a reponer la subvención que se les quitó.
El superintendente de Bomberos de La Granja, San Joaquín y San Ramón, Miguel Bau Díaz, pidió ayuda a las autoridades para poder reponer el cuartel de la Quinta Compañía, que fue completamente destruido durante los desmanes del "11".
A través de un comunicado, la unidad informó el miércoles que a consecuencia de los daños sufridos, producto de una gran cantidad de piedras y otros elementos lanzados contra el cuartel, la compañía sufrió la pérdida de la mayoría de sus vidrios, dejando las dependencias inhabilitadas.
"Hasta que no nos reparen" no pueden reponer el servicio, explicó Bau, recalcando que la situación económica de la compañía impide continuar con la labor, pese a que se trata de daños por 500.000 pesos.
A esto se suma la ofuscación por el ataque recibido. "Es el hecho también. La misma comunidad debe cuidar a sus bomberos. Ese sector, no teniendo bomberos ahí, queda totalmente abandonado", indicó, explicando que las casas de la zona son en su mayoría de material ligero, por lo que un incendio se propaga rápidamente.
Además, denunció que el alcalde de La Pintana, Jaime Pavez Moreno, les quitó la subvención que tenían y hasta ahora han tenido que financiar los servicios que se dan en su comuna con los recursos que les entregan San Ramón y La Granja.
"Hace más de seis meses le pedimos a la Presidenta Bachelet que un representante del Gobierno formara una mesa de diálogo" para hablar con el alcalde y darles una solución, contó Bau. "Al señor Belisario Velasco (ministro del Interior) cuando asumió también se lo hemos pedido y también al intendente y nadie nos ha escuchado, porque no es posible no tener un diálogo y conversar con las autoridades", añadió.
"Nosotros en este sector tenemos 16 carros bomba, un sector entre La Granja, San Ramón y La Pintana y los carros más modernos de la Región Metropolitana" y en la situación actual se les hará más difícil utilizarlos en para atender a los 600.000 habitantes de la zona, ya que los tiempos de respuesta se verán multiplicados al menos tres veces. (Cooperativa.cl)
