"Es un fenómeno transversal que se da en todos los colegios y en todas las realidades sociales", afirmó Sename.
El servicio, Unicef y Proarte fueron los responsables de esta iniciativa.
Proarte, Sename y Unicef se unen contra el bullying.
La empresa Proarte, el Servicio Nacional de Menores (Sename) y Unicef, se reunieron este sábado en una actividad para incentivar las campañas contra el bullying o maltrato infantil.
Por esta razón, decenas de escolares vieron una obra de teatro que muestra las consecuencias de esta práctica.
Paula de la Cerda, directora metropolitana del Sename, declaró que hoy en día el bullying "es un fenómeno transversal que se da en todos los colegios y en todas las realidades sociales", declaró desde el Tetro Mori lugar al que asistieron los escolares.
En cuanto a los niños del Sename, De la Cerda declaró que en este ámbito los menores tienen "una carga aún mayor que llevar por las dificultades que han afrontado y eso hace finalmente que también a veces tengan más dificultades para insertarse en el sistema escolar y también tener relaciones a veces más saludables con sus pares", aseguró.
Por esta razón, la directora regional del Sename recalcó la importancia de que los niños pueden identificar, hablar de este tema y plantear lo que necesitan.
Por otra parte, Susana Bertolucci de Unicef, explicó que el organismo tiene una alianza con la empresa Proarte y se han unido en el tema de la convivencia escolar. "Estamos muy agradecidos, digamos, de que estemos haciendo cosas para poder mejorar la convivencia escolar que es un gran tema hoy en día en nuestra sociedad", afirmó Bertolucci.
El fenómeno del bullying
El bullying se manifiesta en forma física a través de golpes y de forma psicológica a través de insultos y sobrenombres, los que se pueden expresar verbalmente o través de mails, chat y celular. Excluir o ignorar a una persona también está considerado como una acción de bullying.
Algunos síntomas típicos de niños afectados por este tipo de maltrato es no querer ir al colegio argumentando dolores de cabeza o estómago. También está el hecho de que el niño vuelva con algunas pertenencias rotas, sucias o sin ellas, y en cuanto a la parte psicológica, el alumno puede querer aislarse y mostrar irritabilidad.
