Gustavo Hasbún (UDI) presentará acción legal por delito terrorista.
Carabineros espera contar con imágenes de cámaras de seguridad.
La detonación de los artefactos provocó heridas en al menos un funcionario policial.
El diputado Gustavo Hasbún (UDI) acusó "mano blanda del Gobierno" en materia de seguridad y anunció que se querellará por el delito de terrorismo luego de los atentados ocurridos la noche de Navidad en Temuco y que afectaron a una comisaría de Carabineros y posteriormente a un cuartel de Investigaciones.
El parlamentario acusó que lo ocurrido en la Segunda Comisaría de Carabineros de Temuco y el bombazo frustrado en la Unidad de Extranjería de la PDI en la misma ciudad son producto de "la mano blanda con la que está actuando el Gobierno en estos casos, está permitiendo exportar a regiones un grave problema de Santiago".
El vicepresidente de la UDI dijo que "el Gobierno de una vez por todas, tiene que dejar de actuar a medias tintas y empezar a reconocer que acá están ocurriendo actos terroristas porque lo vivido anoche en Temuco, podría haber causado un daño incuantificable".
"Tal como lo hice en otros casos ocurridos en Santiago, voy a presentar durante los próximos días, una querella por delito terrorista en contra de todos aquellos que resulten responsables por estos ataques al cuartel PDI y la comisaría en Temuco", concluyó el diputado.
A la espera de pericias
El general jefe de la IX zona de Carabineros, Nabih Soza, indicó que prefiere no hablar de actos terroristas, al menos hasta no contar con las primeras conclusiones de parte de Labocar.
"Mientras no tenga elementos de juicio que me entreguen las unidades especializadas no puedo entregar más", sostuvo la autoridad.
El general de la policía uniformada agregó que "están trabajando los elementos especializados y vamos a ver si hay alguna imagen", en alusión a la presencia de cámaras en el entorno de los hechos y que podrían dar pistas sobre los responsables de la colocación de los artefactos.
Cabe recordar que personal del GOPE de Carabineros logró detonar de forma controlada un segundo artefacto en la capital regional, y que fue abandonado dentro de un bolso a la entrada de un cuartel de Investigaciones.
Este segundo hecho no dejó heridos ni daños materiales, a diferencia de lo ocurrido en dependencias de la policia uniformada, donde el cabo segundo Alejandro Aravena sufrió lesiones auditivas tras estar a tres metros de la detonación del explosivo.
