Los tres trabajadores, quienes efectuaban reparaciones a una de las bombas de agua, que resultaron lesionados en la explosión que afectó este miércoles a un edificio en la comuna de Las Condes, se encuentran en estado crítico.
El más grave de ellos es José Moraga, de 59 años, y quien tiene el 80 por ciento de su cuerpo quemado y cuenta con un 10 por ciento de posibilidades de superar las lesiones.
El director de la ex Posta Central, Mario Enríquez, detalló que el trabajador "está muy grave; después de ir a pabellón en el día de ayer, se confirmó que las quemaduras son en total un 80,5 por ciento, con un 67 por ciento de quemaduras tipo B, lo que lo coloca en el grupo de sobrevida excepcional por la gravedad de las lesiones".
"Además consideramos que tiene injuria inhalatoria, por lo tanto, la situación del paciente es extremadamente crítica, y en este grupo las posibilidades de sobrevida son de menos de un 10 por ciento", añadió.
En tanto, Manuel Jiménez (45 años), quien permanece en la Clínica Indisa, se encuentra también en estado crítico, con el 93 por ciento de su cuerpo quemado, según indicó el último parte médico entregado este miércoles por el recinto de salud, mientras que la familia solicitó no actualizar su estado de salud.
Mientras que le tercer afectado, Juan Cabezas (64 años), se encuentra internado en la Clínica Las Condes, en condición estable y fuera de riesgo vital, según informó personal médico del establecimiento.
El jefe de la UCI de la Clínica Las Condes, el doctor Tomás Regueira, indicó que "el tiene aproximadamente un 25 por ciento de superficie quemada, está tranquilo, está evolucionando bien, sin disfunción de ningún sistema por ahora".
Sin embargo, "tiene riesgos potenciales de complicarse, infecciones, etcétera, pero aquí nada de eso ha sucedido y esperamos que no suceda", agregó.
Peritajes del caso
Vecinos del edificio afectado se encuentran sin suministro de agua ni luz, situación que se extenderá por alrededor de dos semanas, tiempo en el que se realizarán peritajes en el edificio.
Mientras que desde la Seremi Metropolitana de Salud, iniciaron un sumario para dilucidar causas y responsabilidades de la explosión.
El seremi de Salud, Carlos Aranda señaló que "es parte de la investigación sanitaria conocer las relaciones contractuales de la empresa, es decir, ¿la empresa tenía relaciones?, estos trabajadores ¿Eran trabajadores de ellos?, ¿están afiliados a mutuales?, ¿tenían los seguros laborales al día?, si existen esas condiciones, eso es una base para la investigación".
"Después ¿Qué ocurrió exactamente?, ¿qué no se hizo? Ó ¿Qué accidente, qué cosa inesperada que no podíamos preveer ocurrió en ese momento?", agregó.
La investigación del caso podría durar hasta seis meses, mientras la Fiscalía Metropolitana Oriente, junto al Laboratorio de Criminalística de Carabineros (Labocar), serán los encargados de continuar con las pericias en el edificio.
