En la falange encabezada por Ignacio Walker buscan el consenso.
Mientras que en el PS algunos integrantes quieren evitar la llegada de Camilo Escalona.
Walker señaló que "evidentemente que hay que tratar de explorar que se pueda buscar una mesa de consenso".
En la Democracia Cristiana y el Partido Socialista comienzan a articularse las fuerzas de cara a las elecciones de directiva del próximo año. Faltan algunos meses, pero las conversaciones ya se encuentran en pleno desarrollo.
Al interior de la falange la idea de los sectores que aglutinan al oficialismo de Ignacio Walker y la disidencia de Jorge Pizarro creen que el consenso es una buena alternativa, teniendo en cuenta que en la última contienda de hace dos años demostró que las fuerzas están empatadas, situación que según confidencian en la mesa sigue tal cual.
De allí la idea de intentar un proyecto común que posteriormente sería ratificado en las urnas, como lo señaló Walker: "Evidentemente que hay que tratar de explorar que se pueda buscar una mesa de consenso".
En paralelo, Pizarrro dijo que "estoy hablando que son los militantes los que deciden. Los militantes van a decidir respaldando mayoritariamente, ojalá, una conducción que dé garantías a todos".
Sin embargo, el tema aún no está zanjado. El diputado Aldo Cornejo, quien suena como uno de los hombres en carrera, no está del todo convencido, así como el diputado Fuad Chahín quien opinó que no son los tiempos del acuerdo.
"Los consensos se producen cuando hay coincidencias en lo que se tiene que hacer al interior del partido y en lo que nosotros queremos proponerle al país. Creo que en eso hoy hay diferencias", manifestó Chahín.
La situación de Escalona en el PS
En tanto, en el PS los históricos comienzan a agruparse en torno al nombre de la presidenta del Senado Isabel Allende, quien ha mostrado interés en liderar la colectividad, evitando de paso que el ex senador Camilo Escalona se instale nuevamente en la Presidencia, quien genera resistencia en muchos.
Pese a ello, el diputado socialista Juan Luis Castro -uno de sus partidarios- afirmó que aquello solo será definido en las urnas.
"Creo que la emergencia de Escalona en el escenario político ha puesto nervioso a muchos sectores. Por eso se intentó cambiar la fecha de las elecciones, se ha intentado descalificarlo o decir que no apoya al Gobierno de la Presidenta Bachelet. En fin, muchas leyendas. Pero en la práctica, todo esto se dirime en la elección misma que es en abril del 2015", manifestó.
Pero Allende sigue sumando respaldos, como el del senador Carlos Montes, quien señaló que se necesita otro tipo de liderazgos: "Junto con hablar de nombres hay que hablar de contenido. Creo que Escalona representa algo que ya pasó, tiene muchos talentos para muchas cosas, pero creo que no sería lo mejor para dirigir el PS en los tiempos que vienen y que estamos viviendo".
Las elecciones en el PS se realizarán en abril del 2015.
