El error implicó suministrar el tratamiento contra el VIH a su hijo recién nacido.
No se descarta demandar al Fisco por cerca de 200 millones de pesos.
Una querella por negligencia médica presentó este miércoles un matrimonio en el Juzgado de Garantía de San Bernardo, luego de que el Hospital Parroquial de San Bernardo diagnosticara erróneamente de sida a una mujer, obligando a suministrar el tratamiento contra la enfermedad a su hijo recién nacido.
Los hechos ocurrieron el pasado 6 de julio, cuando Claudia Rebolledo y José Castillo interesaron de urgencia a tener a su hijo en el Hospital Parroquial de San Bernardo, donde los médicos le aseguraron a Rebolledo que era portadora del sida, por lo que su niño también estaría infectado.
"Al otro día en la mañana me dicen que le tenía prohibido darle pecho, entra la doctora pediatra Verónica Silva y me informa que yo tengo sida, confirmándolo. Yo estuve súper mal y ellos pensaban que yo ya sabía que tenía esta enfermedad y me criticaban 'tú tienes sida y por qué no lo reconoces'", denunció la mujer.
Su hijo Vicente, hoy de tres meses de edad, fue sometido al tratamiento AZT para el sida durante 50 días, hasta que se le entregaron los exámenes de una clínica privada, que confirmó la inexistencia del virus tanto en la madre como en el menor.
La madre acusó que en el recinto no se tomó en cuenta un examen anterior que arrojaba negativo y que se había realizado en la Clínica Dávila, mientras que su marido José Castillo aseguró que "la complicación fue tremenda para nosotros como pareja, para nuestro entorno familiar y para todo el mundo que estaba cercano a nosotros".
El abogado de la pareja, Gustavo Varas, explicó que la querella interpuesta en el Juzgado de Garantía de San Bernardo es por negligencia médica porque no se realizaron los protocolos correspondientes a estos exámenes, como dar cuenta al Instituto de Salud Pública.
Además, Varas no descartó entablar una demanda indemnización de perjuicios contra el Fisco que podría alcanzar una suma de 200 millones de pesos.
