Vecinos de la toma de Peñalolén están satisfechos con accionar del Gobierno

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Autor: Cooperativa.cl

Pese a la existencia de una minoria disidente, la mayoría de los pobladores del campamento ilegal esperan que el ministro Ravinet decida cómo negocia las parcelas del Serviu.

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Ante versiones de prensa que aseguraron que una parte de la toma de Peñalolén está exigiendo que el ministro de Vivienda, Jaime Ravinet, entregue las parcelas 2 y 12 de la comunidad ecológica a los pobladores del predio tomado para que ellos decidan qué hacer con ellas, el 93 por ciento de los comités de la toma reaccionaron en contra.

 

Jonathan Rodríguez, dirigente del comité Luz y Esperanza, criticó a la prensa y aclaró que no permitirá que por culpa de un pequeño grupo de disidentes, contrarios a lo decidido por la mayoría y el Gobierno, todos los pobladores se queden sin una solución habitacional. Además señaló que el ministro Ravinet "ha hecho una buena labor y se la ha jugado en estos cuatro años por la toma".

 

Si se hace efectiva la venta de las 13,6 hectáreas de las parcelas 2 y 12 de la comunidad ecológica a la inmobiliaria Casagrande, los pobladores podrán acceder a casas en los terrenos de la media luna de la comuna y otras áreas menos conflictivas, donde hay capacidad para 388 viviendas, otros podrán comprar casas o departamentos nuevos o usados en la misma comuna y quienes lo hagan fuera de ella recibirán un bono de 117 UF por parte de las inmobiliarias.

 

Sandra Oliva, dirigente del comité La Voz de los Sin Casas, integrado por 60 pobladores de la toma, no es partidaria de que el Gobierno se encargue de toda la negociación y está molesta porque aún no se llega a un acuerdo formal.

 

"Si van a vender las parcelas 2 y 12 o permutarlas, primero se le pregunta a la gente, al poblador, si están o no de acuerdo con vender porque cada uno de ellos tiene su asignación y es que las bases decidan realmente y no la cúpula que representa a un porcentaje del campamento", indicó la dirigenta, descartando la posibilidad de tomarse las parcelas.

 

Por su parte, el ministro de Vivienda señaló que "ha habido 12 disidentes, ustedes se pueden imaginar que con 1.700 familias ponerlos a todos de acuerdo es imposible. El dato que nosotros manejamos es que el 93 por ciento de las familias está de acuerdo con esta solución, y por lo tanto vamos a hacer que opere la mayoría. Si hay gente disidente tiene todo el derecho de manifestar su disidencia, pero quiero ser muy claro que no vamos a permitir tomas de ningún tipo de terreno y más aún, el que se tome un terreno queda fuera de la lista del Serviu".

 

Estas declaraciones fueron realizadas luego de una reunión con el Presidente Lagos, quien le entregó a Ravinet todo su respaldo a la gestión realizada en Peñalolén.

 

Los dirigentes esperan que en las primeras semanas de marzo se decida respecto a la venta de las parcelas 2 y 12, para ello están participando en diversas reuniones con las autoridades.

 

En estos momentos hay 800 familias que están iniciando el proceso de diseño de sus casas, las cuales se ubicarán en terrenos en las avenidas Las Torres, El Valle y Las Higueras.

 

En 1997 más de 1.700 familias sin hogar se tomaron un terreno de 23 hectáreas pertenecientes al empresario Miguel Nasur, ubicado en las cercanías de la interesección de la avenida Arrieta y Tobalaba en Peñalolén. Los pobladores están en el lugar hace cinco años y para salir de ahí han exigido que los trasladen a alguna zona de la misma comuna.

 

Las autoridades decidieron comprar dos parcelas en la Comunidad Ecológica, ubicada al oriente de la toma, para que más de la mitad de las familias del lugar se instalen de forma definitiva. Ante lo cual los vecinos del predio se opusieron por la diferencia entre los conceptos arquitectónicos y la consecuente baja de los valores de sus terrenos.

 

La inmobiliaria Casagrande, que ha realizado diversos proyectos en el área, decidió hacer una oferta de 191.600 UF para comprar esas dos parcelas y así continuar con sus negocios en la zona.

 

Los terrenos pertenecen al Serviu (Servicio de Vivienda y Urbanismo) y los pobladores aún no han recibido los títulos de dominio. Es así como la inmobiliaria pretende comprarle las parcelas al Serviu o a los pobladores una vez que tengan sus títulos.

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