Greenpeace entregó listado con las empresas tecnológicas que menos contaminan

Desde agosto de 2006 que Greenpeace realiza un ranking trimestral donde evalúa a las empresas bajo los criterios de cómo y cuánto reciclan sus desechos tóxicos y sobre el grado de consumo energético que ellas tienen.

Bajo estos parámetros, la compañía finlandesa Nokia se posicionó en el primer lugar de la "Guía Electrónica Verde", como la menos contaminante, mientras que la empresa japonesa Nintendo obtuvo el peor resultado.

La compañía de videojuegos registró una puntuación cero en todos los criterios de residuos electrónicos, además que no pudo cumplir con las metas autoexigidas sobre la reducción de emisiones de dióxido de carbono (CO2), debido al aumento de su actividad comercial.

Nokia en tanto, ha recuperado el liderazgo perdido, debido a que se le quitó el punto de castigo obtenido en el informe de julio de este año, situándose en el primer puesto gracias a la mejora de su política de recolección de residuos electrónicos en India.

Una de las sorpresas de este año es de Fujitsu Siemens Computers, que tras estar en el lugar número 15 el año pasado, hoy se ubica en el tercer puesto, gracias al cumplimiento de los criterios sobre eliminación de sustancias químicas tóxicas.

Además, esta empresa fijó para el 2010 el plazo para la completa eliminación de PVC en todos sus productos.

Ranking de eficiencia energética

En eficiencia energética, los mejores resultados recayeron en marcas como Apple, Nokia, Sony Ericsson y Samsung.

En tanto, Motorola es la única empresa de telefonía que aún no tiene fecha límite para eliminar las sustancias químicas de sus productos.

El organismo ecológico anunció que penalizará restando puntos a la puntuación general si se descubre que una empresa está mintiendo, aplica dobles estándares o lleva a cabo malas prácticas corporativas.

El organismo aclaró, además, que este ranking tiene como objetivo hacer más ecológico el sector de los productos electrónicos y obtener el compromiso de los fabricantes de adoptar la responsabilidad completa de sus productos durante todo su ciclo de vida, incluidos los residuos de aparatos electrónicos que generan y la energía que estos productos consumen o se utiliza para fabricarlos.