Consumo de 75 gramos diarios del fruto seco transforman la vitalidad de los espermatozoides.
Sin embargo, aún queda pendiente demostrar si esto se traduce en una mayor fertilidad.
La doctora Wendie Robbins de la Universidad de California y su equipo, aseguraron que comer 75 gramos de nueces al día mejora la vitalidad, movilidad y morfología de los espermatozoides en hombres sanos de entre 21 y 35 años.
Así l
o constata un artículo publicado este miércoles en Biology of Reproduction, donde se detalla la investigación realizada por Robbins, que comprobó que el aumento de los ácidos grasos poliinsaturados (AGP), son fundamentales para la maduración de los espermatozoides y puede aumentar la calidad del esperma.
Las mejores fuentes para encontrar estos ácidos grasos, en una dieta de tipo occidental común, son el pescado y los suplementos de aceite de pescado, las semillas de lino y las nueces, que son especialmente ricas en ácido linolénico (omega 3).
La metodología
Los investigadores seleccionaron a 117 hombres sanos de entre 21 y 35 años que consumían una dieta al estilo occidental, y los dividieron en dos grupos: uno con 58 miembros que evitaron el consumo de frutos secos, y otro con 59 miembros que comieron 75 gramos de nueces por día, quienes finalizado el estudio tampoco reportaron un cambio de peso considerable.
Se detectó un aumento significativo de los niveles de ácidos grasos omega 6 y omega 3, que se tradujeron en una mejoría en la vitalidad, movimiento y morfología de los espermatozoides del grupo, mientras que el otro no experimentó cambios.
Fertilidad
El estudio, que ha contado con el apoyo de la Comisión de Nueces de California, ha mostrado beneficios en la fortaleza de los espermatozoides de quienes consumieron frutos secos, aunque queda pendiente demostrar si esto se traduce en una mayor fertilidad.
Aproximadamente 70 millones de parejas tienen problemas de fertilidad en el mundo, según la publicación, donde cerca de un 40 por ciento de los casos son adscritos a la parte masculina.
Algunos estudios han sugerido que la calidad del semen humano ha disminuido en los países industrializados, posiblemente debido a la contaminación, los malos hábitos de estilo de vida y una dieta pobre en ácidos grasos esenciales, a los cuales se les ha descubierto un sinnúmero de beneficios para el ser humano en el último tiempo.
