Matrimonios homosexuales enfrentan un doble revés en EE.UU.
Mientras en California el gobernador Schwarzenegger planea vetar la legalización de las uniones entre personas del mismo sexo, en Massachusetts los votantes podrán decidir anular su vigencia.
Los matrimonios homosexuales, que hace un año parecían ser una marea que podía invadir Estados Unidos, están frente a un doble revés en el país norteamericano de la mano de los poderes públicos.
Por una parte, el gobernador del estado de California, Arnold Schwarzenegger, confirmó que vetará un proyecto que los autoriza.
Por otra, el fiscal general de Massachusetts aprobó una iniciativa que dará a los votantes del estado la posibilidad de anular una decisión judicial que legalizó estas uniones hace un año.
En California, Margarita Thompson, portavoz del actor devenido en político, dijo en una declaración en nombre del gobernador que la medida, aprobada el martes 6 de septiembre por la Asamblea estatal, se contrapone a los intereses de los electores que rechazaron una similar hace cinco años.
"No podemos tener en California un sistema en el que la gente vota y el Congreso anula su votación. Por respeto a los ciudadanos, el gobernador vetará el proyecto", señaló.
Sin embargo, aseguró que Schwarzenegger "cree que las parejas homosexuales tienen derecho a la protección de la ley y no deben ser discriminadas debido a su relación".
La medida se aprobó el 1 de septiembre en el Senado estatal, dominado por los demócratas, con 21 votos a favor y 15 en contra, todos ellos senadores republicanos a excepción de un demócrata.
El martes el proyecto, que considera el matrimonio como una unión civil de dos personas sin determinar su sexo, fue aprobado por 41 votos a favor y 35 en contra en la Asamblea.
Pero, según la portavoz, Schwarzenegger opina que la decisión final deben tomarla los tribunales o los ciudadanos a través de elecciones.
La legislación californiana describe el matrimonio como la unión de un hombre y una mujer, pero reconocía la existencia de parejas de hecho del mismo sexo a las que concede muchos de los mismos derechos que a las uniones heterosexuales.
California fue uno de los principales caballos de batalla en el debate sobre la legalización del matrimonio entre homosexuales, después que en 2004 el alcalde de San Francisco, Gavin Newsom, permitió el matrimonio de más de 4.000 parejas del mismo sexo.
El otro revés para los partidarios del matrimonio homosexual ocurrió en Massachusetts, donde el fiscal general, Thomas Reilly, aprobó una iniciativa que da a los electores la oportunidad de anular la decisión judicial que los legalizó hace dos años.
El Tribunal Supremo de Massachusetts dictaminó en 2003 que era inconstitucional prohibir el matrimonio homosexual, con lo que dejó abierta la vía para la realización de los primeros matrimonios de ese tipo al año siguiente.
Según fuentes políticas, el tema sería puesto en manos de los electores en una consulta a realizarse en 2008.
Reilly dijo que, aunque no estaría personalmente de acuerdo con la iniciativa, ésta se ajusta al derecho constitucional que tienen los ciudadanos de rechazar decisiones judiciales.
Pero antes que se incluya en los temas a ser votados en las elecciones de 2008, los grupos conservadores deben reunir al 7 de diciembre por lo menos 65.825 firmas.
Posteriormente, la iniciativa quedará en manos de la Asamblea estatal donde deberá ser aprobada por al menos el 25 por ciento de sus 200 miembros.
La decisión del fiscal demócrata, que aspira a ser gobernador del estado en las elecciones del próximo año, fue duramente criticada por grupos partidarios de los matrimonios homosexuales.
Arline Isaacson, co-presidente del Caucus Político Homosexual de Massachusetts manifestó que es muy probable que los detractores de los matrimonios homosexuales reúnan las firmas necesarias. En ese caso, señaló que su agrupación proyecta presentar una demanda para impedir la votación. (EFE)