Frente a frente, los cuatro candidatos quemaron sus últimos cartuchos

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Autor: Cooperativa.cl

Bachelet, Hirsch, Lavín y Piñera aprovecharon la vitrina para hablarle al país sobre sus ofertas, pero también para rebatirse mutuamente, lo que otorgó un carácter más dinámico al encuentro.

Con los ojos puestos en la última encuesta CEP, los candidatos a La Moneda reafirmaron sus ideas frente al país y, si bien Lavín disminuyó agresividad, respecto al foro anterior, hubo un mayor intercambio de interpelaciones entre los cuatro aspirantes.

 

A diferencia, del debate organizado por Canal 13 y CNN, en esta oportunidad los periodistas jugaron un papel más destacado, pese a los errores de Mauricio Hoffmann que se equivocó en dos oportunidades, con la posibilidad de interrumpir a los abanderados y precisar las preguntas.

 

Todos contra todos

 

Tal vez, uno de los puntos más logrados fue la consulta de Mauricio Bustamante (de TVN) quien apeló a los candidatos a expresar claramente sus diferencias entre ellos preguntándoles que idea rescataba del resto y qué moción les precía la más demagógica. Ello fue lo que generó una mayor exposición de ideas contrapuestas y le otrogó un cariz más de debate al encuentro.

 

De hecho en ese momento, ya en la tercera parte del foro, Michelle Bachelet ironizó respecto a las respuestas, afirmando que aparentemente los cuatro candidatos aparecen teniendo las mismas preocupaciones, como la desigualdad y el apoyo a las pymes, pero -afirmó- las soluciones a estos temas no siempre aparecen en los programas de gobierno de sus rivales.

 

La ocasión sirvió a los cuatro candidatos para criticar los postulados de sus contrincantes: a Piñera para decirle a Lavín que su tiempo ya pasó; a Lavín para contestarle a Michelle Bachelet que si es posible una jubilación para las dueñas de casa; y a Tomás Hirsch para burlarse del abanderado de Renovación Nacional por haber dicho alguna vez que era un pequeño empresario, pese a ser uno de los hombres más adinerados del país.

 

Tres versus uno

 

Pese a que las críticas al Gobierno no estuvieron ausentes, respecto a la divergencia sobre límites marítimos con Perú los cuatro candidatos avalaron las tesis del Ejecutivo en su accionar. De igual modo ocurrió con la actuación del Ejecutivo ante la crisis generada por el ingreso al país del ex presidente peruano Alberto Fujimori, salvo la postura de Hirsh, quien demandó la rápida expulsión del detenido ex ocupante del palacio de Miraflores.

 

Al abanderado del pacto Juntos Podemos Más no le costó diferenciarse de los otros tres aspirantes, prueba de ello fue su postura respecto al matrimonio homosexual, siendo el único que se manifestó a favor de esa idea ya llevada a cabo en países como España. La candidata concertacionista sostuvo que no era una prioridad actualmente, mientras Lavín y Piñera apelaron a su condición religiosa para rechazar este tipo de uniones, aunque los tres aspirantes dijeron estar disponibles para legislar sobre derechos para parejas del mismo sexo.

 

La encuesta CEP fue protagonista

 

Sin embargo, fue la evaluación respecto a la encuesta del Centro de Estudios Públicos (CEP) divulgada el martes la que entregó las visiones más contrapuestas ya que cada quien la interpretó como quiso, lo que motivó las alusiones y réplicas de que careció el debate de octubre pasado.

 

Mientras Bachelet, que bajó seis puntos en el sondeo, si bien no le restó importancia es una oportunidad para trabajar con más ahínco para lograr el triunfo en primera vuelta, Piñera la tomó como una reafirmación de su ventaja sobre Joaquín Lavín, y éste para señalar que con los resultados, la Alianza tiene posibilidades de instalar a uno de los suyos en la Presidencia de la República.

 

Hirsch, por su parte, la descalificó afirmando que "esta encuesta la hacen en los pasillos del CEP" y dijo que la mayor parte de los directores del organismo están ligados a la derecha política y económica.

 

Finalmente, luego de más de 90 minutos de preguntas, respuestas, interpelaciones y contrarespuestas, interrumpido en tres ocasiones por comerciales para la televisión, los postulantes dispusieron de 30 segundos para sus palabras finales. Michelle Bachelet los aprovechó en destacar que sí es una mujer preparada y por ello pidió el voto de los chilenos; Piñera sostuvo que para tener un Chile mejor había que construir puentes y no muros que dividan; Lavín le espetó al dueño de Chilevisión que había que esperar hasta el 11 de diciembre para saber quien pasaba a segunda vuelta y que el país estaría mejor si no siguiera al mando la concertación; y Tomás Hirsch acusó a sus tres adversarios de no tener ninguna posibilidad de cumplir con sus promesas electorales y resaltó que el suyo no es un voto inútil.(Cooperativa.cl)