Michael Schumacher rechazó versiones sobre una crisis en Ferrari
Pese al accidente que sufrió en Melbourne, el piloto alemán confía en que su monoplaza rinda a mejor nivel: "Cuando consigamos que los neumáticos trabajen bien, tendremos el ritmo necesario".
Michael Schumacher negó que se puedan establecer comparaciones entre el nuevo monoplaza y la crisis que atravesó Ferrari el año pasado con el F2005, a pesar de los malos resultados que obtuvo en los dos últimos Grandes Premios.
El piloto alemán sufrió un accidente en el GP de Australia el pasado domingo. Fue en la 34 de las 57 vueltas que constaba la carrera, cuando marchaba sexto, se salió a la entrada de la recta de meta y destruyó su Ferrari, que terminó en el lado contrario de la pista, obligando a neutralizar la carrera.
Schumacher tras la carrera admitió: "Fue un error mío, simplemente", y agregó que el F-248 no fue lo suficientemente rápido como para luchar por la victoria en Melbourne.
"La situación actual es completamente diferente. Esta temporada somos mucho más competitivos y tenemos un auto mejor de lo que parece en estos momentos. Cuando consigamos que los neumáticos trabajen bien, tendremos el ritmo necesario", comentaó el piloto.
El equipo italiano introducirá dentro de tres semanas en 'casa', en el circuito de Imola, importantes mejoras en el chasis y el motor del 248.
No obstante, la presión de la incisiva y apasionada prensa italiana es manifiesta. "¿Qué le pasó al viejo Schumacher?' se preguntó el Corriere Della Sera, mientras que en Tuttosport hablaron que se reabría la crisis. "Un día terrible para Maranello"'.
"No quiero buscar excusas", fueron las palabras de Schumacher en alusión al accidente en Australia. (EFE)