Tras último alegato del fiscal, juicio contra Husein se aproxima a su fin
La procuraduría insiste en que el ex dictador iraquí y siete de sus asesores son culpables por la matanza en 1982 de 148 chiítas, lo que podría acabar en la pena capital.
El fiscal en el juicio contra Sadam Husein y siete de sus más cercanos asesores por la masacre de Duyail en 1982 hizo este lunes la última "revisión general" del expediente antes del fin del proceso, y afirmó en su alegato que la matanza fue premeditada y se justificó con el "montaje" de un intento de asesinato.
Tras la intervención del fiscal, se espera la réplica de los abogados defensores, según expresó el presidente del tribunal, con lo que el juicio podría estar pronto listo para dictar sentencia.
El proceso, que dura ya ocho meses, intenta precisar si Sadam y sus siete colaboradores son culpables del asesinato de 148 chiítas como represalia a un atentado fallido contra el ex dictador, cuando su convoy cruzaba la aldea de Duyail, situada al norte de Bagdad.
En la sesión de esta jornada, la número 35, el fiscal del tribunal especial que juzga al depuesto presidente iraquí acusó a Sadam Husein de ordenar personalmente lo que llamó "la matanza de Duyail" y de "montar" un intento de asesinato para justificar la matanza.
En la sala estuvieron presentes todos los acusados, incluidos el hermanastro de Sadam, Barzan Ibrahim al Hassan, y el ex vicepresidente Taha Yasin Ramadán.
"El jefe de los servicios secretos en Duyail había cambiado seis meses antes de la matanza -dijo el fiscal-, lo que indica que estaba planeada con antelación".
Según el fiscal, el intento de asesinato de Sadam no es cierto, "sino un montaje del régimen para justificar la matanza de Duyail".
Los 148 chiítas muertos en Duyail, entre ellos varios adolescentes, fueron ejecutados después de que un "tribunal revolucionario" los declarase culpables de intento de asesinato, hecho que ha llevado a Sadam y sus colaboradores a proclamar la legalidad de las ejecuciones.
El juez que preside el tribunal, el kurdo Rauf Rashid Abdelrahman, consagró la sesión a la exposición del fiscal y pidió a los acusados que guardaran silencio durante su intervención.
Husein y sus compañeros podrían enfrentar la pena de muerte si el tribunal los encuentra culpables de crímenes contra la Humanidad. (EFE)