Volvieron a París los cuatro franceses secuestrados en Yemen
Los cuatro turistas habían sido plagiados el 10 de septiembre por miembros de una tribu que exigían la excarcelación de cinco de sus allegados.
"Muy cansados" volvieron a su país los cuatro turistas franceses que permanecieron secuestrados por miembros de una tribu yemení durante dos semanas hasta su liberación el pasado lunes regresaron a Francia desde Yemen.
"Nos han tratado bien y queremos dar las gracias, de todo corazón, a los que aquí nos han ayudado", dijo uno de los ex rehenes a su llegada al aeropuerto parisiense de Roissy-Charles de Gaulle, donde fueron acogidos por el ministro de Relaciones Exteriores, Philippe Douste-Blazy.
El hombre, que no dio su nombre, recalcó que "estamos todos muy cansados. Tenemos ganas de volver a estar con nuestras familias" y "comprenderéis que queremos tener un poco de tranquilidad".
La identidad de los cuatro turistas, de entre 55 y 58 años y originarios de la región de París y del oeste de Francia, se mantuvo secreta durante todo el secuestro.
Los ex rehenes no comentaron las circunstancias de su liberación, ocurrida el pasado lunes y por la que las autoridades francesas dieron las gracias a las autoridades yemeníes.
El presidente francés, Jacques Chirac, envió una carta a su colega yemenita para expresarle su agradecimiento "sincero" por el "espíritu de colaboración" de las autoridades de Yemen a lo largo de este "delicado asunto" y por el papel "personal" que tuvo el recién reelegido jefe de Estado de Yemen en este "feliz desenlace".
Los cuatro turistas habían sido secuestrados el pasado 10 de septiembre en la provincia de Shabua, al sureste de Yemen, por miembros de una tribu que exigían la excarcelación de cinco de sus allegados.
El Gobierno francés había pedido reiteradamente a las autoridades yemeníes que no emplearan la fuerza para rescatar a los rehenes.
Desde el primer momento el Gobierno de Yemen dejó claro que los captores no tenían motivaciones religiosas ni políticas.
Los secuestros de occidentales son relativamente frecuentes en Yemen, y son perpetrados en general por tribus armadas que toman rehenes como medio de presión al gobierno para dirimir cuentas pendientes. (EFE)