Ejecutivo peruano no será "muy activo" en proceso de extradición de Fujimori
El canciller limeño consideró que la intromisión gubernamental "puede ser contraproducente si se exagera", por lo que desea evitar que se le acuse de "persecución política".
El ministro de Relaciones Exteriores de Perú, José Antonio García Belaúnde, aclaró que Lima no puede ser "muy activo" en el proceso de extradición desde Chile del ex mandatario Alberto Fujimori, porque podría considerarse como una "persecución política".
El canciller señaló que el presunto desinterés de la administración de Alan García por la extradición de Fujimori corresponde a una "interpretación equivocada de los hechos" y que está "ajeno a la verdad".
"Estando en manos de la Corte Suprema (de Chile), ya la capacidad de un Gobierno de actuar puede ser contraproducente si la exagera", indicó García Belaúnde.
Después de la llegada de Alan García a la presidencia peruana, en julio pasado, el entonces procurador para los casos de Fujimori y ex asesor Vladimiro Montesinos, Antonio Maldonado, renunció al cargo por el presunto desinterés gubernamental en apoyar la extradición del ex mandatario.
Fujimori espera en Santiago una resolución por la petición de extradición, a raíz de 10 casos de corrupción y dos por violación a los derechos humanos
El ex gobernante renunció a la presidencia de Perú en 2000, después de un escándalo de corrupción, por fax desde Japón, donde vivió hasta el año pasado.
En noviembre de 2005, Fujimori llegó a Santiago, como paso previo para ingresar a su país, para volver a postular a la primera magistratura.
Sin embargo, a raíz de la orden de captura vigente y la petición de extradición, Fujimori fue detenido por la policía y permaneció recluido hasta mayo pasado, cuanto logró la libertad provisional. (EFE)