Hospital San José derivará a siamesas de Copiapó si se decide separarlas
La alta complejidad, en especial en materia cardiovascular, que implicaría la cirugía de las niñas aún en gestación obligaría a llevarlas hasta el hospital de la UC o al "Luis Calvo Mackenna".
El jefe de la unidad materno-fetal del Hospital San José, Jorge Gutiérrez, aseguró que si se decide separar a las siamesas que, aún en el vientre de su madre, llegaron hasta el establecimiento el lunes, deberán ser derivadas a otro recinto asistencial.
En conversación con El Diario de Cooperativa, el especialista destacó que el recinto está en condiciones de enfrentar una separación de siameses, pero "en este minuto en particular" se requiere "muy probablemente" de un manejo "cardioquirúrgico muy especializado (...) de altísima complejidad".
Por esta razón, serían llevadas al Hospital Clínico de la Universidad Católica o al "Luis Calvo Mackenna". Sin embargo, recalcó que "esa situación se va a dirimir una vez que tengamos claro el momento de la interrupción del embarazo", al que aún le quedan siete semanas de gestación.
Sobre los problemas que enfrenta Johanna Lobos, la madre que el lunes llegó desde Copiapó a la capital, señaló que "en general las complicaciones son del hecho de tener un embarazo gemelar, pero el estar pegadas, el ser siamesas, no particularmente. Pero sí hay mayor discomfort materno, hay aumento más exagerados del volumen de útero, por lo tanto hay mayor probabilidad de parto prematuro".
"No es necesario ser médico para darse cuenta de que las gemelitas están en una situación muy complicada y que eventualmente, si es que llegara a haber una posibilidad de cirugía para cuando nazcan, ésta va a ser de altísimo riesgo y con una probabilidad bastante baja de que salga una de ellas bien parada de la cirugía. Es muy, muy compleja, sobre todo porque están unidas por el corazón y efectivamente todos sabemos que una cirugía cardiaca en un recién nacido y probablemente prematuro es doblemente más complicado", agregó.
Sobre los exámenes para determinar si se interviene quirúrgicamente a las hermanas, Gutiérrez indicó que "tenemos lo fundamental, que es la resonancia nuclear magnética, tenemos ecoradiografías, pero la verdad de las cosas es que uno no puede parar de evaluar permanentemente con nuevas radiografías y probablemente una nueva resonancia para tratar de precisar un poco mejor la extensión del daño, la extensión de la unión, qué vasos están comunicados unos con otros, cuál de las dos gemelas está en el fondo sacando la peor parte de toda esta situación".
"De manera que el camino que queda todavía por recorrer es altísimo. Y todavía estamos hablando sólo de la parte cardiovascular. Falta toda la parte hepática, la parte intestinal, que tienen que evaluarla los cirujanos digestivos, que yo pienso se irá a ser cuando el parto se produzca. Y esto no va a ser antes de cinco semanas", concluyó. (Cooperativa.cl)