Las personas concebidas por esperma donada deben saber su origen desde niños
Los resultados de un estudio muestran que mientras más temprano se conozca el origen, mejor es la reacción del individuo.
En una investigación, realizada con personas concebidas por espermatozoides donados, expertos británicos descubrieron que quienes no se enteraron de sus orígenes hasta que cumplieron los 18 años de edad se sintieron indignados y conmocionados.
El estudio, llevado a cabo en la Universidad de Cambridge, Gran Bretaña, es el primero que compara las opiniones de descendientes de donantes de esperma para inseminación artificial.
El trabajo, presentado durante la conferencia de la Sociedad Europea de Reproducción Humana y Embriología, fue llevada a cabo con 165 individuos de entre 13 y 61 años.
Las conclusiones arrojaron que lo mejor es que un niño conozca el origen de su concepción antes de cumplir los cinco años.
El cuestionario
Los participantes del estudio formaban parte del Registro Estadounidense de Hermanos y Donantes, que ayuda a los descendientes a buscar a su padre y hermanos biológicos.
La mayoría de los participantes vivían en el Estados unidos, y sólo el dos por ciento en el Reino Unido, y a todos se les pidió que respondieran a un cuestionario en internet.
Se les preguntó si conocieron su origen de inseminación con donante durante la niñez o lo supieron siendo adultos.
Los resultados mostraron que cerca de 60 por ciento de los niños que crecieron con un solo padre o en familias con padres del mismo sexo conocieron su origen antes de cumplir tres años.
Entre los que crecieron con padres heterosexuales, sólo 9 por ciento supieron de su origen antes de los tres años, mientras que 35 por ciento lo supo al cumplir 18.
Quienes conocieron su origen después de los 18 años se sintieron indignados y traicionados.
Mejor temprano
A quienes supieron la verdad después de los tres años se les preguntó cómo se habían sentido al enterarse, pero se excluyó a los que se enteraron antes de esa edad, ya que eran demasiado pequeños para recordar su reacción.
Según los investigadores, los resultados muestran que mientras más temprano se conozca el origen, mejor es la reacción del individuo.
Cerca de 65 por ciento de quienes supieron la verdad después de los 18 años dijeron sentirse confundidos, indignados o traicionados porque se les mintió.
Una mujer que conoció su origen siendo casi adulta dijo: "Hubiera agradecido que se me revelara esa información mucho antes en mi vida. Porque descubrir mi identidad biológica a los 17 años fue para mí un evento traumático".
La reacción fue muy distinta para un niño de 13 años que conoció su origen al cumplir cuatro. "Era tan pequeño que no sentí más que algo de interés y curiosidad", dijo.
Según la doctora Vasanti Javda, del Centro de Investigación Familiar de la Universidad de Cambridge, quien dirigió el estudio, "al parecer lo mejor es decirle a un niño en sus primeros años la verdad sobre su concepción con donante".
"Y este resultado apoya los resultados de las investigaciones sobre adopción, que también muestran que los niños se benefician al conocer más temprano las circunstancias de su nacimiento", afirma.
Los expertos aseguran que lo mejor es ser abierto desde el comienzo y decirle al niño la verdad sobre sus orígenes antes de que cumpla cinco años. (Agencias)