Autoridades italianas tienen un máximo de 20 días para recoger a Alfonso Podlech

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Autor: Cooperativa.cl

El ex fiscal militar autorizó su entrega al país mediterráneo.

El caso es sólo parte de la gran investigación sobre diversas dictaduras que lleva el fiscal Giancarlo Capaldo.

El proceso de extradición a Italia del ex fiscal militar Alfonso Podlech deberá estar resuelto en un máximo de 20 días, luego de la aceptación voluntaria del acusado de ser juzgado en Italia por la desaparición del sacerdote ítalo-chileno Omar Venturelli.

"El señor Podlech ha autorizado la entrega a Italia y, por lo tanto, se utiliza el procedimiento urgente de entrega previsto en la ley de Euroorden, consistente en que dentro de los próximos 10 días las autoridades italianas tienen que recoger al señor Podlech de España, y con una prórroga máxima de otros 10 días", explicó el abogado penalista chileno Gonzalo Boye y quien se ha dedicado a la defensa de chilenos en España.

Podlech, quien se encuentra en la cárcel madrileña Soto del Real, es sólo uno de los 145 imputados de la investigación que lleva a cabo en Italia el fiscal Giancarlo Capaldo, conocido por su fama de "súper juez", al estilo del español Baltasar Garzón.

La periodista Marcia Scantelbury, quien fue requerida por el jurista para relatar su paso por los centros de detención de la dictadura, indicó que "el juez es una persona muy agradable, muy cálido, no tienen ninguna solemnidad, con lo cual no estoy diciendo que no sea una persona tremendamente seria y rigurosa".

La extradición de Podlech entregará un gran aporte a la investigación respecto a la desaparición de Omar Venturelli, quien había dejaro sus labores religiosas para unirse al grupo Cristianos por el Socialismo y a su labor de profesor en la Universidad Católica de Temuco.

El 25 de septiembre de 1973, Venturelli se presentó voluntariamente al llamado en su contra en el regimiento Tucapel de Temuco, desde donde fue llevado el día siguiente a la cárcel pública de la ciudad, desde donde desapareció el 4 de octubre.

Desde allí se presume que fue trasladado por varios campos de concentración de la dictadura, a juzgar por las cartas recibidas por su mujer, y su paradero nunca fue establecido.