Padre de menor que espera trasplante: "A Felipe se le están acabando las fuerzas"
Gonzalo Cruzat pidió generosidad a familias de posibles donantes para salvar la vida de su hijo.
Su médico, el cardiólogo Francisco Garay, urgió a intervenir al pequeño lo antes posible.
Gonzalo Cruzat, padre de Felipe, que espera un trasplante de corazón, reiteró el llamado a la generosidad para donar un órgano y salvar la vida de su hijo, quien se ha debilitado visiblemente en las tres semanas que lleva a la espera de ser intervenido.
El padre del menor, de sólo 11 años, detalló a El Diario de Cooperativa que Felipe "nos ha dicho que él todavía le quedan fuerzas para seguir esperando, pero sí que se le están acabando".
"Está ansioso porque nota que se está debilitando", indicó Cruzat, para luego agregar que el menor es absolutamente consciente de su situación.
A 22 días desde su ingreso a la lista de trasplantes para obtener un corazón, "todavía no se ha podido tener un donante compatible, y vemos que Felipe el tiempo le ha ido pasando la cuenta, y lo vemos más frágil, más débil, con menos fuerza ya para poder esperar la llegada de un corazón", añadió.
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| Gonzalo Cruzat, padre de Felipe. (Foto: UPI) |
Por su parte, el cardiólogo Francisco Garay coincidió en que el menor "se ve con menos energía, se ve más cansado, le cuesta más hablar, pasa menos tiempo despierto", pero por ahora "se ve que orgánicamente puede soportar una espera más larga, pero no es una situación que nosotros como médicos o familia queremos eternizar. Hay una premura por resolver esto".
El médico aseguró, en todo caso, que "el que esté estable no significa que no tengamos urgencia: hay que hacer un trasplante lo antes posible", descartando la posibilidad de usar, por ahora, un corazón artificial.
Finalmente, el padre reiteró su llamado a los posibles donantes: "les pediría que se pongan en el caso nuestro, de qué pasaría si un hijo de ellos estuviera necesitando de una donación para poder seguir viviendo. Les pido que se interioricen de la situación de Felipe y tengan la generosidad de darle vida a un niño de 11 años".
