Homicida de joven en Providencia: Necesito que me perdonen
Marcelo Contreras enfrenta junto a otros tres hombres el juicio por el crimen de Víctor Garrido.
La víctima recibió una golpiza mortal en septiembre de 2008.
Con una petición de perdón por parte de los victimarios, continuó este viernes el juicio por el asesinato del joven Víctor Garrido Moya, iniciado el jueves, ocurrido el 12 de septiembre de 2008 en la calle Nueva de Lyon, de la comuna de Providencia.
Durante la mañana prestaron declaración ante el Tercer Tribunal Oral en lo Penal de la capital lo dos principales imputados por el crimen: Marcelo Contreras y Simón Moyano, quienes arriesgan hasta 20 años de presidio.
En su respuesta al interrogatorio por parte de la Fiscalía, Contreras pidió perdón "por lo que ha sufrido la mamá de él, la familia de él. Yo tengo familia igual, tengo un hijo, y necesito que me perdonen, pedirles perdón. Yo nunca pensé que iba a pasar esto", dijo.
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| El juicio se lleva a cabo en el Tercer Tribunal Oral en lo Penal de la capital. (Foto: UPI) |
Relato de la agresión
El brutal ataque causó impacto el año pasado luego que se atribuyera la golpiza a la supuesta condición de "pokemón" de la víctima, en medio de las reflexiones sociológicas por la emergencia de las llamadas "tribus urbanas", y también por el ensañamiento mostrado por los agresores, quienes no contentos con golpearlo y apuñalarlo, le reventaron una botella en la cabeza; todo cuanto quedó registrado en las cámaras de seguridad de la comuna de Providencia.
En este contexto, fue que Simón Moyano entregó su versión de los hechos: "Con la (botella) que andaba trayendo, yo como que me hinco para golpearlo. No lo golpeo así parado, o con la intención de dejarlo en el suelo inconsciente. En ningún momento yo pensé eso. No se me pasó por la mente. Yo le pego con la botella en la cabeza, y le pego dos patadas, y de ahí yo le digo, 'pa que no volvai más', porque tenía miedo que se parara y después volviera con más amigos a pegarnos, porque como estaba en un grupo.... Yo le pego las dos patadas, le digo eso, y me retiro de donde estaba Víctor".
El homicida prosiguió relatando que "pasa alguien como a los 10 segundos y vuelvo donde está Víctor. Lo miro de lejos y digo '¿Porqué no se para...?' Me asusté donde no se paró, dije 'le debo haber causado algo grave', porque no se paraba. Y al llegar allá le palpo la cabeza, para ver si le había dejado un cototo o sacado sangre de la cabeza, y en la mano no me queda sangre. Y me agacho donde él estaba y veo que en su pantalón había sangre. Y ahí yo dije 'está cortado, está apuñalado'".
El juicio oral continuará en horas de esta tarde y se extenderá también a la próxima semana, instancia en que deberá ser resuelto por la jueza Raquel Lermanda, quien deberá definir la pena para los otros dos imputados -Marcelo Pardo y Freddy Soto- quienes, a diferencia de Contreras y Moyano, arriesgan sólo una pena de 10 años en régimen cerrado en un centro del Sename, ya que al momento de participar en el crimen eran menores de edad.
Padre de Víctor Garrido: No busco venganza, sólo justicia
Tras escuchar con entereza los relatos de la agresión que cobró la vida de su hijo, Roberto Garrido, padre de Víctor, conversó con la prensa, instancia en que aseguró que su familia no busca venganza, sino que sólo justicia.
"Nosotros somos bien católicos. Nosotros escuchamos mucho a la gente. (La petición de perdón de Marcelo Contreras) yo la sentí, mi señora yo creo que también va a tener cierta consideración con respecto a esto", expresó.
Garrido agregó que "nosotros nunca vamos a pensar en venganza, ni nada de eso. Nosotros queremos justicia, nada más. Dependemos 100 por ciento de lo que diga la Justicia".
