Justicia investiga posible nueva red de corrupción para cambiar fallos
Al ex padrastro de las hermanas Prieto le ofrecieron cambiar resolución por 10 millones de pesos.
Ministro Silva Cancino tomó la investigación administrativa.
Los tribunales de Justicia y el Ministerio Público investigan una posible nueva red de corrupción que ofrecía cambiar fallos en la Corte Suprema y la Corte de Apelaciones de Santiago.
La situación quedó al descubierto luego que José Ramírez Zepeda, condenado por abusar sexualmente de las hermanas Angela y María José Prieto, denunció que un hombre, identificado como Alejandro Sánchez Valencia que no es funcionario judicial, le pidió 10 millones de pesos para cambiar el fallo.
La propuesta del supuesto operador se produjo una semana antes de conocer la sentencia de la Corte de Apelaciones de Santiago y el condenado incluso obtuvo la copia de la resolución.
Aunque las primeras informaciones indican que Sánchez no es funcionario judicial, el presidente de apelaciones jorge Dahm no descartó la participación de empleados.
"Si el operador es externo, el responderá ante la Justicia ordinaria. A lo que nosotros nos interesa dejar sumamente claro es que no haya interno de nuestros funcionarios involucrados en este asunto. Solamente tenemos antecedentes muy preliminares y el ministro los está investigando y hasta el momento no ha aparecido ninguno, pero eso no quiere decir que no pueda aparecer", comentó.
El análisis del fallo estuvo compuesto por la ministra Rosa María Maggi, integrante de la Suprema; la jueza Dobra Lusic, y abogado Emilio Pfeffer.
A raíz de la denuncia, se abrió una investigación criminal en la Fiscalía Metropolitana Centro Norte, a cargo de Alejandra Bravo, mientras que en materia disciplinaria administrativa el tribunal de alzada capitalino nombró al ministro sumariante Mauricio Silva Cancino.
El magistrado ya tomó declaraciones a Ramírez Zepeda y se espera que ejecute una serie de diligencias con funcionarios judiciales en paralelo a la indagación de la fiscalía.
El año pasado, en la Quinta Sala de la Corte de Apelaciones se falsificó un fallo, en el que intervino Alfonso de la Cerda, quien era parte de una red de corrupción.