AFDD duda sobre si La Moneda sabía sobre ex DINA trabajando para el Ejército
Lorena Pizarro declaró que, si estaba en conocimiento, el Ejecutivo estaría "amparando la impunidad".
Si no lo sabían, reflexionó, las Fuerzas Armadas serían un "poder tras el poder".
La presidenta de la Agrupación de Familiares de Detenidos Desaparecidos, Lorena Pizarro, se preguntó si el Gobierno sabía sobre ex integrantes de la DINA que se encuentran trabajando en el Ejército, recordando que la Presidenta Michelle Bachelet fue ministra de Defensa.
Según declaró Pizarro a El Diario de Cooperativa, si el Ejecutivo "sabía esta situación y la calló" significaría que "sigue amparando la impunidad, como lo hemos denunciado con mucha fuerza".
"(Si no lo sabían) viene otra situación igualmente grave que la anterior: ¿Quién manda en este país? El Ejército, las Fuerzas Armadas tienen tal autonomía que siguen siendo un poder tras el poder real", afirmó.
Según la presidenta de la AFDD, si el Ejecutivo no estaba informado de esta situación significa que "el Ejército particularmente sigue siendo un poder en la sombra y sigue resolviendo, haciendo lo que quiere".
Pizarro declaró que no le cabe "ninguna duda" que el comandante en jefe del Ejército, Oscar Izurieta, estaba al tanto de la presencia de ex integrantes de la DINA que están trabajando a honorarios para la institución y aseguró que no hay "actitudes concretas" que demuestren una colaboración con los tribunales de justicia en casos de violaciones a los derechos humanos.
Ejército evaluará los antecedentes
El coronel Iván González López, jefe del departamento de comunicaciones del Ejército afirmó que no tienen todos los antecedentes y no saben por qué llegaron a trabajar ahí asegurando que "estamos evaluando la situación" y harán una evaluación completa.
Por su parte, el ministro de Defensa, Francisco Vidal confirmó que se comunicó telefónicamente con el comandante en jefe del Ejército Oscar Izurieta y aseguró que es probable que existan más casos.
Hasta el momento, se detectó que se encuentra trabajando en el Ejército un médico que torturó a prisioneros -según consta en algunos procesos- y un ex fiscal militar que falsificó documentos para encubrir el crimen del diplomático español Carmelo Soria.
La diputada Isabel Allende no descartó llamar a las autoridades del Ejército al Parlamento mientras que el presidente del Partido Socialista, Camilo Escalona, declaró que estos hechos aparecen "como un desmentido atroz del proceso de reencuentro entre civiles y uniformados".