Zelaya denunció lanzamiento de "gases tóxicos" a embajada de Brasil
El mandatario dijo que policias y militares que rodean la legación fueron autores.
El Gobierno de facto negó en un comunicado las acusaciones.
El depuesto presidente de Honduras, Manuel Zelaya, denunció este viernes el lanzamiento de "gases tóxicos" a la embajada de Brasil en Tegucigalpa, donde se encuentra junto a familiares y un grupo de seguidores desde el lunes.
Zelaya dijo a medios locales que los militares y policías que rodean la sede diplomática lanzaron "gases que empiezan a llenar y enrarecer el ambiente" y que tanto él como algunos de sus acompañantes han presentado problemas de salud.
"Se me irritaron los ojos", aseguró el depuesto gobernante, quien añadió que también sufrió problemas en la garganta, mientras que algunos acompañantes suyos sufrieron sangrado de nariz, ardor en la garganta, mareos y otras molestias.
En tanto, el Gobierno de facto que preside Roberto Micheletti aseguró en un comunicado que "es totalmente falso que miembros de la Policía Nacional hayan colocado un equipo especial que dispare un líquido que provoque malestar a las personas que están al interior de la embajada de Brasil".
El comunicado del Gobierno de facto, sin aludir a que el propio gobernante depuesto hizo la denuncia, añadió que, "según las amistades del ex mandatario Manuel Zelaya, es un químico elaborado en Israel que se les lanzó", lo cual "se desvirtúa".
Además indicó que lo único que hay en este momento en esa zona es un operativo de limpieza que realiza la Alcaldía Municipal del Distrito Central. "Los trabajos de limpieza se hacen normalmente, pero en estos días se ha tenido que redoblar el personal debido a la presencia de seguidores de Zelaya, como también de las personas que llegan a visitarlo", apuntó el comunicado oficial.
"Se continuará dando protección al ex mandatario Zelaya, como también a sus familiares y seguidores y miembros de esa sede diplomática que se encuentran en su interior, y muestra de ello es que hasta ese local solo ingresan las personas que el señor Zelaya acepta recibir", puntualizó.
Zelaya reiteró su denuncia que las casas de los alrededores de la embajada, rodeada por un riguroso cordón militar que no permite el paso, han sido evacuadas, y reiteró que se ponen límites y trabas a la entrada de alimentos y medicinas.
El jefe de Estado depuesto permanece desde el lunes pasado en la legación brasileña luego de regresar de manera sorpresiva y clandestina al país, del que fue expulsado por los militares el 28 de junio.