Sarkozy calificó de "calumnia" la acusación de recibir dinero de Bettencourt
Multimillonaria acusó haber entregado dinero para la campaña electoral del presidente francés.
"Me gustaría que el país se apasionara por los grandes problemas", se quejó el mandatario.
El presidente francés, Nicolas Sarkozy, calificó de "calumnia" la acusación por parte de una antigua contable de Lilliane Bettencourt de haber recibido dinero de esta multimillonaria para su campaña electoral de 2007.
Sarkozy, que realizaba una visita a un centro sanitario en la región de París, hizo una referencia indirecta a las revelaciones de esa contable en una breve intervención ante el público, después de haberse negado a responder que le interrogaban sobre la cuestión.
"Me gustaría que el país se apasionara por los grandes problemas, por la organización de la sanidad, las pensiones, cómo crear crecimiento (económico)" más que creer "en la primera calumnia, que no pretende más que manchar y sin ninguna especie de realidad", declaró.
Durante toda la mañana, numerosas voces de la mayoría gubernamental lanzaron mensajes al Elíseo para que Sarkozy se pronuncie de forma clara y contundente, mientras la oposición de izquierda exigía explicaciones y la dimisión del ministro de Trabajo, Eric Woerth.
"Si el presidente de la República no responde, esta crisis de confianza se convertiría en una crisis política", señaló la primera secretaria del Partido Socialista, Martine Aubry.
Woerth, que antes de encargarse de la cartera de Trabajo era ministro del Presupuesto -responsable de la política fiscal-, y que es desde hace ocho años tesorero del partido de Sarkozy, recibió, según la contable, Claire T., un sobre con 150.000 euros de Bettencourt para financiar la campaña electoral del actual presidente, algo completamente ilegal.