Ingrid Betancourt manifestó estar "dolida" con Colombia
"Los únicos responsables de mi secuestro fueron las FARC", aclaró.
Se encuentra en Washington para presentar su libro "No hay silencio que no termine".
La ex candidata presidencial de Colombia Ingrid Betancourt afirmó este miércoles en Washington que está "muy dolida" con su país natal tras su experiencia como rehén de la guerrilla, y que por ahora no está interesada en regresar a la política.
"Estoy muy dolida con Colombia porque fue injusto... mi familia, todos nosotros hemos sufrido mucho", dijo Bentancourt durante un emotivo encuentro en el Club Nacional de Prensa para presentar su libro "No hay silencio que no termine".
En concreto, Betancourt expresó resentimiento de que se la haya responsabilizado por su cautiverio de seis años y medio a manos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en la selva colombiana cuando, a su juicio, el Estado le falló.
"Quiero ser muy clara en esto porque los únicos responsables de mi secuestro fueron las FARC. No estoy diciendo que el Gobierno en ese momento de mi secuestro fue responsable, pero no acepto que digan que sólo yo fui la responsable de mi propio secuestro", afirmó Betancourt, quien en varias ocasiones rompió en llanto al recordar sus años como rehén.
El secuestro en 2002
Recordó que, como candidata presidencial en 2002, tenía derecho a la protección y a guardaespaldas, pero señaló que el Gobierno le retiró "esa seguridad" de los escoltas.
"Si (la zona) era tan peligrosa y si se trataba de una zona de guerra, como dicen que me advirtieron, su obligación era no dejarme pasar por el control militar... y no me impidieron pasar, como no lo hicieron con nadie", enfatizó.
Aunque aseguró que la política ya no la motiva, tampoco lo descartó para un futuro.
"No quiero hacer política ni en Francia ni en Colombia, pero quién sabe, estamos en las manos de Dios... pero por ahora, como dije, mi felicidad es descansar", agregó Betancourt, que fue entrevistada por el popular programa televisivo de Oprah Winfrey.
Por otra parte, Betancourt se defendió de las críticas de la demanda de más de seis millones de dólares que había presentado contra el Estado colombiano, aunque insistió en que ahora no aceptaría compensación alguna, así la suma fuese "el doble o el triple".