Alcaldes exigieron poner fin a las máquinas tragamonedas por ser ilegales
Municipalidades de Santiago, Providencia y Macul aseguran que provocan problemas de seguridad.
En la AChM exigen una ley para regularizar el problema.
Las municipalidades de Santiago, Providencia y Macul están en pie de guerra contra la existencia de las máquinas tragamonedas en las calles de esas comunas, argumentando problemas de seguridad ciudadana, ilegalidad y ludopatía, por lo que pidieron poner fin a estos aparatos en los barrios de la capital.
El alcalde de Santiago, Pablo Zalaquett (UDI), afirmó que las máquinas constituyen casinos ilegales que acompañan una serie de perjuicios para la comunidad, los cuales deber ser erradicados por los municipios.
"Estamos fiscalizando y cerrando todos los locales de máquinas tragamonedas, porque son casinos ilegales y no están permitidos, la ley no los ampara, sólo se permite máquinas de destrezas tipo flipper u otro tipo de actividades", explicó.
Agregando, "está demostrado que los casinos ilegales generan un sentido de pertenencia hacia ludopatía, hacía el juego excesivo, la gente pierde dinero, esa gente después termina en el alcohol y en algunos lugares hemos visto tráfico de drogas".
Los ediles además aseguraron que en los almacenes del pequeño comercio ha ido penetrando cada vez más este negocio, lo que ha permitido el libre acceso a menores de edad.
El alcalde de Macul, Sergio Puyol (DC), comentó que "se han observado personas en cuanto a cómo se pide prestado (el dinero) y cómo también juegan niños, porque no hay control ni tenemos capacidad de controlar que niños entren a jugar a estos lugares".
En los próximos días la municipalidad de Macul retirará cerca de 1.600 máquinas tragamonedas, procedimiento que tiene relación con el cumplimiento de la normativa existente, la que señala que los aparatos de juegos de azar sólo pueden encontrarse al interior de casinos.
Ley para regularizar el problema
Por su parte, el alcalde de San Joaquín y presidente de la Comisión de Seguridad de la Asociación Chilena de Municipalidades, Sergio Echeverría, dijo que la mayor parte de las representaciones comunales es partidaria de regular este problema a través de una ley.
"Si nosotros declaráramos realmente una norma pareja tendríamos que eliminar los 'Teletrak' y una serie de negocios que en este minuto se dedican al juego y que no se está aplicando la norma legal, como el caso de las tragamonedas", manifestó.
"Hay que ser cuidadoso en los fundamentos, porque al final vamos a ver es que detrás de ciertas posiciones éticas lo que realmente se oculta son los grandes intereses que tienden a beneficiar a los grandes casinos".
El Gobierno presentará una indicación a una iniciativa que ya se tramita en la Comisión de Constitución del Senado y que busca solucionar los problemas de las máquinas tragamonedas en las calles. La modificación saca del debate la controversia respecto de si las tragamonedas son de destreza o de azar, al establecer que cualquier máquina que entregue premios en dinero corresponden a un casino.