Fernando González y su retorno al tenis: "Es el comienzo del final de mi carrera"
El tenista nacional confesó a la Revista El Sábado sus temores a la operación que se sometió a la espalda
Reconoció que está enfocado en los Juegos Olímpicos de Londres 2012, pero que si las lesiones se mantienen no duda en abandonar el tenis.
Fernando González (514°) volverá a las canchas este lunes en el ATP de Belgrado luego de superar una larga recuperación que implicó pasar por el quirófano en noviembre de 2010, y el tenista chileno está consciente que estará atento a las respuestas que le dará su cuerpo para proyectarse en el deporte de alta competencia de cara a los próximos años.
"Yo todavía tengo como gran foco los Juegos Olímpicos de Londres, pero si pasan los nueves meses del ranking protegido, y tengo dolores fuertes y no puedo ganar partidos, no tendría problemas en decir 'hasta acá no más llegamos'. Todo depende de cómo me vaya sintiendo", señaló el jugador en entrevista a la Revista El Sábado.
"Este retorno será simbólico, porque siento que es el comienzo del final de mi carrera. Pero sé que, lo que tengo que averiguar ahora, no será cosa de tres o cuatro semanas. Tomará más tiempo darme cuenta qué va a pasar conmigo", indicó.
El tenista nacional confesó sus temores a la operación que se sometió a la espalda y que lo tuvo 35 semanas sin ver acción en el ATP.
"Fue un momento muy difícil porque me daba miedo que la operación saliera mal. Pero después me di cuenta que le había dado tanto de mi vida al tenis, tanto tiempo, tantos entrenamientos, que no me merecía terminar así. Una cosa es estar cansado y otra jugar con dolor. No parece, pero el tenis es un deporte muy emocional; pasas de la euforia a la frustración en minutos, ahí, en plena cancha. Y estar siempre con dolor físico te hace tolerar mucho menos los malos momentos y los rivales se dan cuenta de eso. No era el final de carrera que quería. Podían ser nueve meses perdidos ahora, es cierto, pero los iba a sumar al final. Fui preguntando: Nalbandian me dijo que no había tenido problemas en la cadera tras la operación; el terapeuta de Lleyton Hewitt, que también le pasó lo mismo, me escuchó y me dijo: no veo el problema, opérate. Dije: me voy a jugar la última opción, porque peor que como estoy ahora no creo que quede", señaló.
El jugador de La Reina confesó que este tiempo sin actividad le sirvió para desconectarse un poco, y vivir cosas que por la nutrida agenda del circuito a veces le era complicado realizar.
"Extrañé la competencia, la cancha, no las cosas anexas. La otra vez entrené con Murray en Estados Unidos y fue así como: esto se siente bien. Los nueve meses me sirvieron; no vi nada de tenis, viajé mucho, pero por placer; hice un crucero en Colombia con mi polola. Fui a un Mundial, pero sobre todo estuve harto tiempo solo, sin agendas de torneos, ni entrenamientos pactados. Y eso justo cuando todos me preguntaban si me retiraba, que cuándo dejaba de jugar. Todos tenían una opinión que darme y ese tiempo que pasé solo me ayudó para despejarme y poder escucharme", señaló.
El doble medallista olímpico espera que en este retorno a la actividad pueda abstraerse de las presiones y disfrutar del tenis.
"Los últimos 10 años no disfruté tanto, entre el ranking, el torneo, las presiones, los contratos. Y al final, cuando mejor jugué, fue cuando lo hice para entretenerme, cuando lo pasé mejor. Si puedo lograr eso otra vez, ya valió la pena todo el esfuerzo. Es mi meta: más que llegar a tal o cuál ranking o intentar ganar un torneo, lograr pasarlo bien", confesó.
En tanto, señaló que su meta para los próximos años será volver a ser competitivo y dejar la profesión como un jugador peligroso
"Quiero retirarme como Marat Safin, que se fue cuando era 80 y 70 del mundo, siendo muy competitivo. De hecho me ganó la última vez que jugamos. Retirarse así es lo que busco, yo dejar al tenis, que el tenis no me deje mí; como todavía un jugador peligroso", declaró.