La arcilla azul de Madrid será evaluada por la ATP y la WTA
Los directores del torneo español tratan de evitar lo resbaladizo de la cancha.
Las críticas de los jugadores se han sucedido diariamente.
El futuro de la tierra azul en el torneo de Madrid dependerá de una evaluación de la ATP y de la WTA al finalizar este evento, aunque tras las últimas quejas del serbio Novak Djokovic, número uno del mundo, y del resto de jugadores, la organización trabaja a destajo para averiguar "por qué la pista resbala tanto".
"Estamos averiguando por qué la pista resbala tanto, ya que hace una semana no sucedía esto", comentó Carlos Moyá, uno de los directores del evento.
Este viernes está prevista la visita de Brad Drewett, presidente de la ATP, aunque la decisión final sobre la continuidad de la pista azul, que de momento solo tiene vigencia para este año, será debatida después del torneo por la ATP y la WTA, entes que considerarán todos los factores, y será tomada bien durante Wimbledon o durante el Abierto de Estados Unidos.
"Están trabajando por la noche incluso para mejorar las condiciones de la pista y evitar que los jugadores se resbalen. Afortunadamente no ha habido ningún lesionado", señaló Moyá.
Manolo Santana, director del torneo, tuvo que afrontar ayer martes una tensa situación cuando en la conferencia de prensa de Djokovic tras vencer al español Daniel Gimeno-Traver.
"Es imposible jugar en esta pista y la ATP no ha tenido en cuenta la opinión ni la voz de los jugadores. Tienen que saber lo que está pasando y los jugadores deber estar protegidos. Es imposible moverse en la pista central. Es mucho más resbaladiza", dijo el tenista de Belgrado.