La música mundial se encomienda al "streaming"
Por estos días se desarrolla en Cannes, la 49 edición del Mercado Internacional del Disco y de la Edición Musical.
En ella se debatirán especialmente los nuevos escenarios de la industria y la supremacía de los formatos digitales.
Spotify es el principal protagonista de que las ventas digitales hayan superado por primera vez a las ventas físicas.
Los temores y esperanzas depositadas en la escucha en línea o "streaming", sobrevuelan el arranque de la 49 edición del Mercado Internacional del Disco y de la Edición Musical (MIDEM), que abrió este viernes sus puertas en Cannes.
El recién nombrado director general de la plataforma francesa de escucha en línea Deezer, Hans-Holger Albrecht, desembarcó en esa gran feria musical con una afirmación que sorprendió al numeroso publico que aguardaba expectante sus palabras: "El streaming está canibalizando las descargas ilegales".
Tras Albrecht, Vania Schologel, una de las responsables de Tidal, la plataforma de "streaming" apadrinada por el rapero estadounidense Jay Z, moderó el tono para reivindicar la escucha online como la manera "más sencilla de disfrutar de la música" y aseguró que herramientas como la suya "han llegado para quedarse". Situación que también, desde hace un tiempo, se avizora en Chile.
Además de inaugurar las influyentes Midem Talks, un ciclo de conferencias que aspira a esclarecer los desafíos del sector, ambas intervenciones dieron el inicio a la gran cita de una industria que ve en el auge del "streaming" -y sus casi 41 millones de suscriptores en todo el mundo- una solución a sus males.
El futuro
"La escucha online se parece mucho a un proyecto de futuro para la industria musical", aseguró el presidente del MIDEM, Bruno Crolot, quien valoró positivamente esa cifra de usuarios, aunque reconoció que todavía es "insuficiente".
"En primer lugar, hay que alcanzar una masa crítica que reparta más beneficios entre los miembros de la cadena de valor, y en segundo lugar, debe haber más transparencia. Debemos explicar mejor las reglas del juego", agregó.
Se trata de "organizar y darle parámetros" a un mercado que, según Albrecht, admite espacio para cuatro o cinco competidores y que aún aguarda el despliegue de Apple, cuyos equipos ya trabajan en su propio servicio de escucha en línea.
Pese a todo, la industria musical sigue tratando de remontar la peor crisis de su historia, una hecatombe que contrajo el volumen de negocio hasta el 60 % desde 1999, fecha oficiosa de la popularización de internet y la imparable ascensión que vino después.
Giro en la industria
La cita de Cannes se produce apenas dos meses después de que la Federación Internacional de la Industria Discográfica (IFPI, siglas en inglés) anunciase que las ventas de música digital superaron por primera vez a las de los soportes físicos, al alcanzar 6.850 millones de dólares (unos 6.162 millones de euros) frente a los 6.820 (6.136 millones) del CD o el vinilo.
El mismo informe reveló que plataformas como Spotify o Deezer aportan cerca de 1.600 millones (1.439) anuales al sector.
"Hemos abierto un camino, ahora sólo queda explicarlo bien", zanja Crolot, para quien "las fronteras entre las industrias culturales son cada vez más permeables gracias a la tecnología", y es ahí donde se debe "buscar el futuro".