María Ayuda: Como país estamos al debe en atención mental de menores
El director de la fundación que trabaja con el Sename se refirió a la muerte de la pequeña Lisette en uno de los centros del servicio.
Criticó que el sistema de protección se centra más en el proceso judicial que en las necesidades de los niños.
En torno a la renuncia de la directora del Sename, Ricardo Evangelista enfatizó en que los problemas van más allá del desempeño de una persona.
Ricardo Evangelista, director de la Fundación María Ayuda, una de las redes de hogares que presta servicios al Sename, conversó sobre la muerte de Lisette, la menor que falleció en uno de los hogares del servicio, y reconoció que "como país estamos al debe en la atención mental de los menores maltratados".
Lisette estuvo brevemente en un hogar de María Ayuda, pero fue derivada al Sename debido a su estado de salud mental, el que -según Evangelista- la fundación no estaba en condiciones de tratar.
Frente a ello, el director reconoció a La Tercera que en el sistema de protección a menores de nuestro país "no somos lo suficientemente capaces, sobre todo en los problemas de salud mental".
"Cuando vienen niños con problemas de salud mental severos, es algo que nosotros no estamos preparados para recibir. Lisette estaba con necesidades severas, por eso se quedó poco tiempo con nosotros", añadió.
"Tenemos desconocimiento de lo que ocurre con nuestros niños, estamos centrados en un tema muy judicial, y no hemos podido detectar desde la familia, desde el lugar donde empiezan esos problemas", remarcó.
"Tenemos que esperar a que nos lleguen a través del sistema judicial que asigna una medida de protección. Ese es el debate que debemos tener hoy, cómo evitar que los niños lleguen a un hogar", aseveró Evangelista.
El profesional manifestó que "como país estamos al debe en la atención mental de los menores maltratados. Hay un vacío y un desafío tremendo en este tema, no hay camas psiquiátricas suficientes, sobre todo para estos niños que necesitan recuperar ese vínculo que perdieron, y tienen necesidades de salud mental profundas".
"Y no sólo pasa por un tema de camas, sino de recursos para contar con personal especializado en los hogares", añadió.
Renuncia de la directora del Sename
En torno a la renuncia que presentó Marcela Labraña, quien ocupaba el cargo de directora del Servicio Nacional de Menores (Sename) y que dejó el cargo a raíz de la muerte de Lisette, sobre la que se investigan las condiciones, Evangelista apuntó que un hecho como aquel trasciende al desempeño de un solo cargo.
"No me corresponde evaluar a la (ex) directora del Sename, porque se está investigando, y vamos a saber finalmente qué es lo que ocurrió; pero sí me corresponde decir ante este hecho inminente, que tenemos que ponernos a trabajar en conjunto. No mirar el desempeño individual, sino cómo lo estamos haciendo como país", indicó.
"Que muera una niña de once años en uno de nuestros hogares no debió haber pasado, no es el final que queremos para ellos, queremos que puedan salir y volver a reunirse con sus familias", enfatizó.
"En algunos casos no resulta, en otros no hay adultos significativos, pero la realidad es que sí hay que volver a trabajar con los vínculos familiares. Para eso se requiere una intervención mucho más multisectorial, no solamente dejarlos en un hogar para que el hogar se encargue, o en un programa especializado. Se necesita algo más integral y eso es lo que nos falta", argumentó el ejecutivo.