Daniel Gustavo Cartagena recibió un golpe tras lesionar al presidente boliviano.
Médico le dio tres días de reposo al jefe de Estado.
Un feroz rodillazo le propinó el presidente boliviano Evo Morales a un rival en el durante un partido de fútbol amistoso entre Palacio y Alcaldía de La Paz.
El jugador Daniel Gustavo Cartagena llegó tarde a un cruce del presidente y lo lesionó, aunque después se llevó la peor parte: fue expulsado por el árbitro y golpeado por el jefe de Estado.
Tras el accidentado partido, Cartagena señaló al diario La Razón que ningún momento hubo mala intención, nunca quise agredir al Presidente".
"Yo pasé el balón y de repente recibí un ‘planchazo', pero ésta no es la primera vez que me pasa", relató Morales sobre el incidente, aprovechando de negar haber ordenado la detención de Cartagena después del partido, ya que según trascendió un policía intentó arrestarlo después del match.
Un comunicado de Palacio detalló que el mandatario sufre una "laceración de piel a nivel de la cara anterointerna de la pierna derecha, dolor a nivel del gemelo interno en su tercio inferior, limitación funcional en la marcha y un hematoma en el gemelo interno de la pierna derecha".
El doctor Roberto Baldellón que trató al presidente tras el "impacto violento" recomendó al mandatario reposo de tres a cuatro días, así como un tratamiento de "crioterapia" en la zona afectada durante dos días, fisioterapia de carácter analgésica y la aplicación de un vendaje nocturno.
