Un menor de 15 años murió en confuso incidente el jueves en Bariloche.
Otras dos personas también perecieron en enfrentamientos con la policía.
El gobernador de la provincia de Río Negro, Miguel Saiz, separó de sus labores a cuatro funcionarios policiales de Bariloche, incluido el jefe de la comisaría 28, Jorge Carrizo, por los serios incidentes que acabaron con la muerte de tres personas, dos de los cuales eran menores de edad.
Los hechos se registraron el jueves, cuando en un confuso incidente, Sandro Bonefoi, de 15 años, recibió un balazo en la cabeza.
Esta muerte provocó la ira de vecinos del barrio en el que vivía el joven, que se movilizaron hacia la citada comisaría y atacaron con piedras la fachada de la sede policial.
La policía sumó efectivos para vigilar la comisaría y se enzarzó casi hasta la madrugada del viernes en violentos enfrentamientos con los manifestantes. En los disturbios murieron Sergio Cárdenas y Nicolás Carrasco, de 28 y 16 años, respectivamente, mientras que otras 12 personas resultaron heridas.
El suboficial acusado del crimen del adolescente de 15 años fue detenido y será indagado en las próximas horas por el juez Mario Losada, que esta mañana se reunió con el intendente local y un grupo de concejales.
Durante esta jornada, pobladores de San Carlos de Bariloche marcharon al Centro Cívico de la ciudad rionegrina para volver a repudiar la actuación policial y reclamaron la renuncia del comisario a cargo de los agentes involucrados en los hechos.
