Los siniestros fueron controlados por personal de la Conaf.
Empresas forestales interpusieron denuncias ante la Fiscalía.
En poco más de 40 horas, los principales focos de incendios forestales en la Región del Biobío arrasaron con 2.300 hectáreas.
Si bien los trabajos en conjunto de Conaf, las empresas forestales, el Ejército y Bomberos dieron resultados y los focos están contenidos y sin propagación, debido a las condiciones climáticas de 29 a 30 grados de temperatura pronosticada para este fin de semana, el proceso de liquidación solo podrá comenzar este domingo.
Es por ello que la Oficina Regional de Emergencias mantiene la condición de alerta roja para las provincias del Biobío y Ñuble, y amarilla para Concepción.
Según explicó el jefe del departamento de protección contra incendios forestales de Conaf de la región, Eduardo Mera, trabajan para determinar las causas y no se descarta la intencionalidad del siniestro de Yumbel, ya que el pasado miércoles, en un perímetro de 50 kilómetros, surgieron cinco focos simultáneos de incendios forestales.
"Estamos recabando toda la información para ver si hay alguna intencionalidad en el inicio de este siniestro", señaló Mera.
El gerente de Corma Biobío, Emilio Uribe, señaló que las pérdidas para las empresas forestales están avaluadas en cuatro millones de dolares, por lo cual Celco y Mininco interpusieron denuncias para que la Fiscalía investigue.
"Particulares que han sido afectados, y también propietarios menores que han sido afectados, están realizando las denuncias ante la Fiscalía para investigar a fondo quienes estan detrás de estos incendios", señaló Uribe.
