El defensor aseguró que el real objetivo en el Superclásico ere alcanzar la cima.
El argentino no hablaba en conferencia de prensa desde sus polémicos dichos de 2014.
Julio Barroso se refirió a la importancia del triunfo.
El defensor de Colo Colo Julio Barroso habló desde el Estadio Monumental tras el Superclásico del pasado sábado en que los albos derrotaron por 1-2 a Universidad de Chile, asegurando que lo importante era ganar para llegar al lugar de la tabla que querían estar en el Clausura.
"Tenemos un equipo experimentado que sabe manejar las situaciones. Cuando estuvimos mal en las primeras fechas no nos desesperamos y ahora que estamos bien tampoco nos exaltamos demasiado, porque nuestro objetivo siempre fue ganar un campeonato y no solo un partido para matar el mal momento", manifestó el zaguero en conferencia de prensa.
"Lo lindo es darle vuelta la mano a como arrancamos el torneo. Es un equipo que le gusta la adversidad y sabe que si la supera está cerca de conseguir cosas. Es un plantel al que le duelen los momentos malos, pero trabajó para revertirlo. Hoy estamos donde queremos estar", agregó.
Al respecto, también se refirió a las críticas del inicio de temporada por el alto promedio de edad del equipo que dirige Héctor Tapia. "El fundamento de la edad debe basarse en algo, decir en que afecta eso a Colo Colo. Uno sabe la calidad de jugadores que tenemos".
Sobre la victoria, advirtió que "se disfrutó mucho, todos saben lo que es jugar un clásico. Estamos contentos porque el condimento era ponernos provisoriamente en la punta del torneo sin saber lo que iba a pasar con Cobresal, ese era el objetivo más que por el superclásico. Fue un fin de semana extraordinario para nosotros".
"Nos sorprendimos por el gol porque estábamos jugando muy bien. U. de Chile es uno de los grandes del país y en su casa iba a ser difícil. Sabíamos que lo podríamos dar vuelta, el empate no era lo que queríamos", añadió.
Barroso, además aseguró que no haberse llevado un triunfo el sábado los hubiese dejado con una sensación amarga, pues el objetivo era llegar a la cima del Clausura.
"Los clásicos aparte del resultado tienen el factor anímico para ambos equipos. El empate o la derrota nos hubiese dejado un sabor amargo porque nuestro objetivo al ver la seguidilla de resultados conseguidos era llegar a la punta. Necesitábamos ganar y este envión es grande, pero tiene que tener el equilibrio necesario para saber que lo que queda será difícil", indicó.
El zaguero argentino, además aseguró que aún no pueden sentirse el mejor equipo del Torneo de Clausura porque eso "se tiene que demostrar cuando se sale campeón. Solamente ganamos unos partidos para ponernos en la posición de la tabla que queríamos estar. Tenemos que demostrarlo con el campeonato, no sirve otra manera".
Además, advirtió que las buenas actuaciones individuales se deben al funcionamiento como equipo. "Este equipo anda bien en lo individual porque en lo colectivo es bueno. Si hacemos las cosas bien todos nos va a ir bien a todos. En el fútbol por la dinámica, la táctica y muchos factores que hacen que los partidos no los pueda resolver un solo jugador", expresó.
También se dio el tiempo para destacar el buen momento de Esteban Paredes. "Extraordinario. Está en un gran momento. Nos está demostrando algo que nosotros no sabíamos que era. Lejos está siendo el mejor delantero del país. Es un jugador de mucha garra y corazón que se identifica de una manera tremenda con la institución. Nos permite resolver partidos complicados", apuntó.
El defensor que no hablaba en conferencia de prensa desde la polémica por sus dichos en contra de la organización del torneo, aseguró que no se arrepiente de lo expresado en ese momento.
"No me arrepiento, no debo pedirle disculpas a nadie. Me castigaron por eso. Le agradezco a la gente del sindicato, a Aníbal Mosa, Ricardo Abumohor y al señor Carlos Chandía que lo tuve en mi casa cenando, tiene una calidad de persona que escasea", sentenció.
