Con simples medidas se puede dejar el hábito del endeudamiento

Adquirir un compromiso financiero de vez en cuando puede ser un modo de acceder a bienes importantes, que de otro modo no podrían adquirirse, pero cuando las deudas se transforman en un estilo de vida y la persona pasa a ser un esclavo de ellas, la fascinación por las facilidades que este sistema entrega comienza a descender bruscamente.

Para evitar caer en el sobreendeudamiento y destronar al crédito como una herramienta usual  para adquirir bienes, es necesario tomar algunas medidas  para deshacerse de los malos hábitos financieros.

De acuerdo al sitio Gomestic.com, el primer paso es  analizar reflexivamente cualquier situación de endeudamiento, pasando por alto la tentación de los avisos y los comerciales que intentan seducir al cliente presentando  los créditos o las tarjetas como el modo de conseguir fantásticos descuentos  y oportunidades. Para tomar un compromiso financiero, es necesario  superar ese primer impulso, considerar si se poseerá la liquidez suficiente para pagar las cuotas en los próximos meses  y establecer cuán real es la necesidad de poseer determinado producto o servicio.

Además, es necesario contar con información e interesarse por saber más sobre la deuda que se adquiere, para no quedarse sólo con la palabra de la entidad financiera y poder manejar de manera óptima este compromiso. Conocer la tasa de interés, el día de facturación y dedicarse a aprender más sobre cómo ahorrar y seguir un presupuesto, son conocimientos útiles que le permitirán  tener un mayor control sobre sus finanzas.

Por otra parte, el sitio Associated Content, recomienda  examinar el propio comportamiento del consumidor, conocer las debilidades, las tentaciones y detectar los patrones que permiten el gasto desmedido. Construir buenos hábitos es parte de este proceso, por lo que incluir actividades gratuitas en la rutina diaria, es un buen comienzo para desacostumbrarse a depender del dinero para desarrollar una buena vida.

En caso de haber adquirido una deuda previamente, lo  recomendable es establecer un plan para cancelarla en el menor tiempo posible, para evitar un alza debido a los intereses  y para disminuir el tiempo en que esta obligación ocupará parte de su vida. En este sentido, es mejor establecer un presupuesto austero por un par de meses y pagar la mayor parte de sus compromisos, que alargar la cancelación en muchas cuotas pequeñas que signifiquen pagar casi el doble del dinero inicial y den pie para tentarse con otro crédito más en el intertanto.