Los habitantes podrán abrir nuevas fuentes de agua para destinarlas a consumo humano.
La medida tendrá efecto por seis meses.
El Gobierno decretó escasez hídrica en las regiones de Coquimbo y Antofagasta, por lo que los habitantes podrán tomar medidas para frenar la sequía que afecta a la zona.
Gracias a este decreto, los habitantes podrán abrir nuevas fuentes de agua que estén destinadas al consumo humano.
Como explicó la seremi de Obras Públicas de Coquimbo, Pilar Honorato, "con este decreto, la Dirección General de Aguas (DGA) autoriza a los sistemas de agua potable rural a hacer perforaciones, extraer agua subterránea sin autorización ni inscripción de derechos".
"La DGA le da una aprobación, un visto bueno temporal y este decreto dura seis meses a partir del 9 de febrero de este año", añadió.
Francisco, agricultor del Valle del Huasco, calificó el decreto como "insuficiente", señalando que no responde a los problemas reales de los pequeños agricultores de la zona.
"Si hablamos de sequía también tenemos que hablar de administración del agua, quién tiene la mayor disponibilidad de agua para el uso agrícola y no afectar a la gran masa, que son los pequeños agricultores. Acá en la Provincia tenemos grandes agricultores que no se ven afectados por el consumo de agua, sino por la baja de mano de obra", explicó el trabajador.
El coordinador de la Brigada SOS de Huasco, Juan Carlos Labrín, acusó al Gobierno de no fiscalizar la distribución de agua, afirmando que en el país hoy existe una "piratería hídrica".
"Lo crítico y particular es que nuestros valles han tenido agua durante siglos. Toda nuestra gente precolombina se mantuvo en nuestro país siempre con la poca agua que había. El tema ahora es la distribución de lo poco que hay", reflexionó.
El decreto también permite que la Dirección General de Aguas distribuya, según estime conveniente, los recursos existentes en las fuentes naturales de agua en las zonas afectadas si es que no existe acuerdo entre los usuarios.
