Una versión periodística española informó de una supuesta reunión del diputado del Movimiento al Socialismo Feliciano Begamonte con dirigentes de Batasuna, brazo político del grupo vasco.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, afirmó este martes que es "imposible" una relación entre su partido, el Movimiento al Socialismo (MAS), y la banda terrorista vasca ETA.
"Imposible (que) el MAS, el Gobierno o Evo Morales pueda tener relaciones con ETA. No (los) conozco", dijo el mandatario en La Paz.
Morales respondió así a una versión hispana, reproducida este martes en la capital altiplánica, en la que se menciona una supuesta reunión, en junio pasado, del diputado del MAS Feliciano Begamonte con dirigentes de la ilegalizada Batasuna, considerado el brazo político del grupo subversivo.
Según la edición digital de El Correo, la seguridad española detectó "en las últimas fechas intentos de la izquierda 'abertzale' (independentista) y de ETA de buscar un nuevo santuario en Bolivia, en especial, ante el temor que les provoca un hipotético cambio de actitud en Cuba hacia los terroristas si fallece Fidel Castro y se producen cambios en el régimen comunista".
El mandatario boliviano insistió en que "es totalmente falso" que hubiera una reunión de ETA con dirigentes del MAS.
Morales agregó que no cree que ETA participe en las reuniones públicas de "organizaciones sociales" del País Vasco, en el norte de España, a las que asistieron representantes del MAS e incluso él mismo cuando viajó alguna vez a Bilbao, en el norte de España.
"Cuanta gente va y viene. Somos de la cultura del diálogo, no creo que ETA pueda estar ahí, reuniéndose. Prácticamente no tenemos ninguna relación", dijo Morales.
"No se cómo operan, pero de manera institucional, de manera partidaria, no hay ninguna relación con la ETA. Yo de nombre y por la prensa sé de ETA", agregó.
Morales afirmó que el MAS, "por principio, programa, estatutos", no tiene contactos con esa clase de organizaciones.
El diputado Begamonte, a su vez, señaló que efectivamente el año pasado viajó al País Vasco, pero que se reunió con "organizaciones sociales" que lo invitaron, y negó contactos con ETA.
Morales dijo que en anteriores ocasiones también se le trató de relacionar a él y a su partido con la Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), lo cual atribuyó a una "guerra sucia" para intentar "desprestigiar y desacreditar" a su gobierno y movimiento político. (EFE)
