El jefe de Estado boliviano defendió la aprobación de la nueva constitución realizada el domingo durante una sesión de emergencia de la Asamblea Constituyente en la ciudad de Oruro.
El presidente de Bolivia, Evo Morales, ratificó que va a "aguantar" la "conspiración" de las "oligarquías" bolivianas y la "internacional, encabezada por EE.UU.", al defender este lunes la aprobación de una nueva Constitución que impulsó en su país.
"Tendré errores, pero no traiciones", subrayó en una rueda de prensa en Buenos Aires, donde agradeció el "apoyo" de mandatarios suramericanos que, como él, asistirán este lunes a la investidura de Cristina Fernández de Kirchner como nueva presidenta de Argentina.
Sostuvo que, además de la "conspiración" de grupos "oligárquicos" que se oponen a una Bolivia "con más justicia social", hay una "internacional, encabezada por Estados Unidos".
"Aguantaremos como aguantamos 500 años en esta dura batalla para cambiar a Bolivia", subrayó Morales, quien en varias ocasiones destacó que sus opositores lo llaman "indio" con desprecio y han redoblado sus esfuerzos por desplazarlo del Gobierno.
Los grupos opositores "son cada vez más reducidos, pero cada vez más violentos", aseguró luego de negar que los seguidores del oficialista Movimiento al Socialismo (MAS) hayan "echado" a sus adversarios de la Asamblea Constituyente que el domingo aprobó en Oruro la nueva Carta Magna.
También remarcó que "es mentira" que 17 legisladores de la alianza conservadora Poder Democrático y Social (Podemos), liderada por el ex gobernante boliviano Jorge Quiroga, hayan decidido no acudir a la sesión.
En este sentido, afirmó que "por lo menos cuatro" representantes de Podemos "se quedaron a debatir", mientras que el resto se retiró del recinto de la Asamblea, luego de insultar a sus autoridades.
Los gobernadores opositores de cinco de las nueve regiones bolivianas afirmaron este lunes que el proyecto de Constitución impulsado por Morales y aprobado el domingo no tiene validez y ni siquiera corresponde discutirlo.
Los prefectos se reunieron "de emergencia" durante esta madrugada en Cochabamba (centro) para analizar la aprobación "unilateral y antidemocrática" del proyecto constitucional, confirmó el portavoz
de la gobernación regional, Erick Fajardo.
Evo Morales aseguró en Buenos Aires que la nueva Carta Magna boliviana "esta vez fue aprobada con la presencia de todos los sectores", y que "son salvadores de la patria" los legisladores que apoyaron esa reforma.
La nueva constitución de Bolivia "respeta la propiedad privada", crea un Estado "plurinacional con unidad en la diversidad" y expresa "la renuncia a la guerra", puntualizó.
Habrá "una economía mixta, pero plural" en la que las empresas "serán socias" y no "patronas" de Bolivia, agregó.
El presidente boliviano puso como ejemplo la "sociedad" con la petrolera hispano-argentina Repsol-YPF "que hace dos semanas descubrió un nuevo yacimiento que proveerá de un millón de metros cúbicos" de gas "para el consumo interno" y "para abastecer a Argentina".
Consideró que si se descubrieran "tres pozos más", Bolivia podría contar con "unos cinco millones de metros cúbicos diarios" de gas.
Destacó que en Bolivia "ya no sufre la usurpación" de sus recursos naturales y recordó que el fisco recauda impuestos petroleros por 2.000 millones de dólares frente a los 300 millones que reunía antes de la nacionalización de los hidrocarburos, en mayo de 2006. (EFE)
