Beijing sostuvo que la forma adecuada para enfrentar la situación de Teherán es el diálogo.
El presidente iraní visitará este viernes el pabellón de su país en Shanghai.
China aseguró que las sanciones que el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó contra Irán -con el voto a favor de Beijing- no cierran la puerta a la diplomacia, que es "la vía correcta".
"China desea trabajar continuamente con las naciones involucradas y contribuir para que la cuestión se trate de forma pacífica y diplomática", destacó el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino Qin Gang en un comunicado.
"China mantiene siempre que la forma adecuada de enfrentar la cuestión nuclear iraní es a través de diálogo, negociación y otros medios diplomáticos", añadió.
Qin insistió en que China, al tratar la situación, tiene en consideración "la validez del mecanismo internacional de no proliferación y la salvaguarda de la paz y la estabilidad en Oriente Medio".
Beijing se mostró siempre muy moderada hacia Teherán, pero votó a favor de las sanciones, como el resto de miembros permanentes del Consejo de Seguridad (EEUU, Rusia, Reino Unido y Francia) y siete de los 10 no permanentes (Brasil y Turquía votaron en contra y el Líbano se abstuvo).
La resolución adoptada establece nuevas restricciones a las operaciones de los bancos iraníes en el exterior si se sospecha que tienen vínculos con los programas nucleares o balísticos de Teherán, al tiempo que incrementa el escrutinio de las transacciones en el exterior de todas las entidades financieras del país.
Asimismo, endurece el embargo de armas a Irán y sanciona a tres entidades controladas por la empresa naviera estatal iraní, así como otras 15 controladas por la Guardia Revolucionaria, reforzando además el régimen de inspecciones a buques y aviones iraníes.
Ahmadineyad, que calificó las sanciones de "moscas latosas", tiene previsto viajar este viernes a Shanghai, donde visitará el pabellón iraní en la Exposición Universal de esa ciudad.
