Continúan los enfrentamientos militares en el país.
El Estado Islámico intenta controlar las zonas de Al Hasaka.
Yihadistas han conquistado amplias partes del territorio sirio e iraquí.
Un atentado con coche bomba que se produjo en las cercanías de una central eléctrica dejó al menos 11 fallecidos en el noreste de Siria.
El ataque terrorista efectuado por el Estado Islámico (EI), se produjo en la ciudad de Al Hasaka causando "víctimas y daños materiales" cerca de esa central eléctrica tras la explosión del vehículo, informó la agencia de noticias Sana.
El Observatorio Sirio de Derechos Humanos indicó de que las víctimas son efectivos del Ejército del presidente Bashar al-Assad y milicias afines, ya que los ataques se dirigieron contra puestos de control de las fuerzas gubernamentales.
Además explicó que las instalaciones están situadas cerca de un centro penitenciario de menores, en el barrio de Neshua Oriental, en el sur de Al Hasaka, cuyo control fue recuperado ayer por las tropas gubernamentales.
Los yihadistas también lanzaron otro ataque que les permitió avanzar sobre el terreno y aproximarse a la cárcel de menores, y en el cual murieron y resultaron heridas un número de personas que el Observatorio no especificó.
Durante los últimos días, el Estado Islámico y el Gobierno sirio han tenido recurrentes enfrentamientos para controlar zonas en poder del régimen en Al Hasaka, donde el 40 por ciento de la superficie está en manos de las fuerzas sirias y el 60 por ciento, de los kurdos.
