Los bombardeos se produjeron poco después de que el Parlamento visara la acción militar propuesta por David Cameron.
Apuntan a golpear una de las principales fuentes de financiamiento del grupo terrorista.
Cazabombarderos Tornado de la Real Fuerza Aérea británica (RAF) atacaron seis objetivos en el centro petrolífero Al Omar, en la frontera con Irak.
Cuatro aviones de la Real Fuerza Aérea británica (RAF) bombardearon un yacimiento petrolero controlado por el Estado Islámico (EI) en Siria después de que el Parlamento aprobara los ataques.
Según confirmó este jueves en declaraciones a la BBC el ministro de Defensa, Michael Fallon, los cazabombarderos Tornado de la RAF atacaron seis objetivos en el centro petrolífero Al Omar, en el este de Siria, en la frontera con Irak, que es utilizado por el Estado Islámico (EI) como fuente de ingresos.
El ministro precisó que él mismo dio la orden de atacar poco después del voto en la Cámara de los Comunes.
El yacimiento es una "gran parte de los ingresos" que ISIS utiliza para financiar sus actividades, explicó el ministro, que confirmó que los aviones volvieron a su base de Akrotiri, en Chipre.
Fallon agregó que las autoridades aún tienen que evaluar el éxito de la misión realizada por los cazabombarderos, pero recalcó que supone "un verdadero golpe" para la organización terrorista, responsable de los atentados de París del pasado 13 de noviembre y del asesinato de más de 20 turistas británicos en junio en una playa de Túnez.
"Trabajo por hacer"
"Lo que fue realmente importante del voto de anoche es que se confirmó que el Reino Unido es un aliado serio. Hemos salido en defensa de Francia, que solicitó nuestra ayuda con nuestros aviones de la RAF", señaló Fallon, quien agregó que hay otros posibles blancos similares en Siria que esperan atacar en los próximos días.
"Hay mucho trabajo por hacer para atacar estos blancos y ayudar a cortar el flujo de armas y petróleo a los terroristas", explicó.
Tras un debate de más de diez horas en el Parlamento, los diputados aprobaron por 397 votos a favor y 223 en contra la intervención militar pedida por el primer ministro, David Cameron, que contó con el apoyo de cerca de 70 diputados laboristas.
El líder del primer partido de la oposición, Jeremy Corbyn, contrario a los ataques, concedió libertad de voto a sus parlamentarios ante la división interna en la formación y la posibilidad de que algunos miembros de su equipo dimitieran en caso de verse obligados a apoyar la línea marcada por la dirección.
Antes de la votación de anoche, el Reino Unido sólo tenía autorización del Parlamento para atacar al EI en Irak.
