Así lo informó este domingo la Policía israelí.
Sólo el 20 por ciento de los casos tuvo una inspiración nacionalista, se indicó.
Los ataques y actos de vandalismo contra la población palestina de Jerusalén se elevaron a 56 casos durante el año pasado, el doble que en 2011, informó este domingo la Policía israelí al hacer balance de la actividad delictiva en el distrito.
El número de casos esclarecidos, generalmente perpetrados por colonos o nacionalistas judíos, llegó únicamente al 20 por ciento, informó la edición electrónica del diario Yediot Aharonot.
Los ataques consistieron, en su mayoría. en actos de vandalismo como el pinchazo de ruedas de vehículos de propiedad palestina y pintadas en paredes del tipo de "muerte a los árabes" o "lista de precios". Esta segunda inscripción hace alusión a la política de un reducido círculo de colonos extremistas que desde hace años vengan con ese tipo de acciones los ataques de palestinos a judíos o las decisiones de las autoridades israelíes que consideran perjudiciales para la colonización del territorio ocupado de Cisjordania.
En el 85 por ciento de los casos, informó el jefe de policía del Distrito de Jerusalén, Yosi Pariente, no hubo violencia personal.
"Debemos recordar que cualquier niño con un bote de pintura puede hacer las pintadas", declaró el comisario, recordando que debido a este tipo de ataques, a finales del año pasado la Policía creó un equipo especial de 10 personas con la misión de combatir la violencia nacionalista, cuya misión es "ofrecer soluciones a nivel operativo, investigaciones y con información de inteligencia".
La Policía israelí informó además que el año pasado unos 400 palestinos de Jerusalén Este fueron arrestados por arrojar piedras y bombas molotov, estadística que no se considera una escalada en las protestas populares.
"Dentro de Jerusalén no percibimos ahora una escalada. Sí vemos más disturbios palestinos (...) primero contra el Ejército y después contra nosotros", sentenció.
