La presidenta respaldó a la embajadora en Londres que instó al canciller británico a conversar sobre Malvinas.
"El hablar no puede ser invalidado y mucho menos criticado", aseguró Fernández ante la polémica.
La presidenta argentina, Cristina Fernández, consideró "insostenible la negativa al diálogo" del Reino Unido al reivindicar el accionar de la embajadora del país en Londres, Alicia Castro, quien aprovechó un acto público para preguntar al canciller británico sobre el conflicto de Malvinas.
"Nadie puede decirse demócrata si se niega al diálogo, en especial si detrás de eso se encuentra la Organización de las Naciones Unidas, cuyo plenario debe replantear su verdadero rol", indicó Fernández durante un acto en la sede del gobierno.
Fernández salió así al cruce de las críticas que recibió Castro, quien el lunes tomó la palabra durante la presentación la revisión anual del gobierno británico sobre derechos humanos y democracia ante periodistas y diplomáticos, y le preguntó al canciller William Hague si estaba dispuesto a iniciar negociaciones para encontrar "una solución pacífica y permanente" al conflicto de Malvinas.
"¿Le vamos a dar una oportunidad a la paz?", concluyó la diplomática, parafraseando a Fernández, cuando en febrero pasado instó al Reino Unido a negociar la soberanía de las Malvinas.
"El hablar no puede ser invalidado y mucho menos criticado. Creemos en los pilares básicos de los derechos humanos, en el derecho internacional y ningún país puede estar en contra de estos pilares", manifestó la jefa de Estado.
La mandataria argentina afirmó que su país "continuará trabajando duro en todos los foros y espacios institucionales para lograr consenso y voluntad sobre las islas Malvinas", bajo dominio británico.
"Lo que no puede sostenerse y se torna francamente insostenible en todo el mundo es la negativa al diálogo" para negociar por la soberanía de las islas, señaló Fernández al inaugurar el patio Malvinas Argentinas en la Casa Rosada, sede del Gobierno.
